En torno a la lesión del talentoso Dani Garcia gira especialmente la inquietud azulada

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La preocupación se ha instalado en Ses Canaletes. O acaso ha sido compañera de viaje inevitable desde que el proyecto virara bruscamente en agosto hacia un nuevo horizonte. La complicada hoja de ruta diseñada por la cúpula cestista del Centre Cultural i Esportiu para el primer equipo masculino ha incrementado su dificultad tras el debut del Menorca Talaiòtica en la Liga EBA.

La limitación de recursos para confeccionar, con tiempo y a tiempo, una plantilla de garantías mínimas en efectivos y calidad ha topado, a las primeras de cambio, con la incontrolable adversidad de las lesiones. Dos de una tacada. Para mayor inri. Dani Garcia y Cice Mercadal regresaron del primer desplazamiento a tierras catalanas -a la localidad gerundense de Quart- como los damnificados del duro partido que les planteó el líder del grupo A de la conferencia C.

El base catalán abandonó la pista dolorido tras notar una 'patada' en la zona del tendón de Aquiles de su pierna derecha. Una primera exploración ocular del traumatólogo, ayer, no permitió realizar un diagnóstico que determinara el alcance del dolor, que fue a más en las horas posteriores al partido. El club desea que el daño quede en una mera contusión. Pero lo cierto es que Dani 'Maki' Garcia deberá someterse probablemente a una resonancia magnética para definir el deterioro físico de la zona afectada.

El caso de Cice Mercadal aparenta ser más leve. El escolta sustituyó al jugador catalán tras su lesión y al poco tiempo tomó el mismo camino, hacia el banquillo, tras sufrir una probable rotura de fibras del cuádriceps.


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