Los jugadores celebran la victoria | Hestia Menorca

TW
3

El Hestia Menorca recuperó sensaciones al firmar en la tarde de este domingo en Las Palmas su segunda victoria consecutiva, al derrotar al Herbalife Gran Canaria. Un triunfo apurado, más allá de lo que indique el resultado final (60-71), pues los hombres de Javier Zamora volvieron a ser muy irregulares en ataque, y al final, en el momento decisivo, tuvieron que encomendarse a la calidad de Jermaine Marrow para matar el partido y derrotar a un rival todavía más errático.

Eso sí, al margen de la victoria, dos lecturas muy positivas pueden sacarse de este enfrentamiento; primero, el regreso del base madrileño y capitán del equipo, Pitu Jiménez, que tras perderse dos partidos por lesión se reincorpora a la dinámica competitiva del equipo menorquín, y segundo, el buen nivel defensivo de los menorquines, que junto al ya mencionado Marrow y la aportación de Pablo Longarela, destacaron como las claves para explicar la victoria, que además le permite conservar el tercer lugar (compartido con otros equipos) en la clasificación de la conferencia Este de LEB Plata (6-3, el récord del Hestia Menorca tras nueve jornadas; Benicarló, 8-1, sigue líder, y el Sant Antoni de Eivissa es segundo, 7-2).

Pese al 0-4 inicial y a la igualdad que habría hasta bien entrado el cuarto (14-12 en el 7’ con Smallwood sobresaliendo) los locales firmaron un final de cuarto muy bueno desde el triple (4/6 por 2/10) y terminaron con una máxima (22-16). En el segundo, el equipo menorquín se puso el mono de trabajo y eso creó dudas en un rival que ya no encontró el recurso del triple pero que mantuvo las diferencias hasta casi el ecuador (33-25 en el 4’). Entonces Longarela brilló con luz propia, junto con muchos minutos de buena defensa, acabaron con una remontada en el último ataque visitante. Al descanso, 37-39, dominio del Hestia Menorca.

Pobres registros

En el reinicio del partido, tanto los pupilos de Gabi Alonso como los de Javier Zamora mostraron su cara más oscura y esta manga sería para olvidar (parcial total de 8-10, +4 para el cuadro menorquín al terminar el mimso). Mientras que en el último cuarto también habría nervios pero diferentes, pues ambos fueron ambiciosos y buscaron el triunfo por encima de cualquier otro aspecto. Y es que el Hestia siempre jugaría a favor de marcador pero con el ‘aliento’ de su oponente encima hasta el último momento (59-61 en el 8’), cuando el estadounidense y jugador franquicia de los menorquines, Jermanie Marrow, tiró de sus mejores recursos y sentenció (60-71).