El cuadro menorquín con todos los jugadores disponibles a excepción Omar Lo y de Pol Molins (quien no jugará más esta temporada) y tras lograr un triunfo no apto para cardíacos en la visita a Amics Castelló (en el partido número 100 de Javier Zamora), saldrá con el cuchillo entre los dientes, con la posibilidad de lograr una nueva victoria muy importante de cara al nuevo objetivo de la plantilla (lograr el último billete de los playoff de ascenso). Para eso, deberá ganar al Baloncesto Fuenlabrada, un equipo totalmente distinto comparado al que se encontró en el partido de ida, y que tiene en su haber una racha de cuatro victorias consecutivas (la última contra Rioverde Clavijo donde sufrió más de lo esperado 78-75), todo gracias a un fichaje al estilo Oliver Stevic, este jugador es Jordan Swing, la nueva superestrella del Baloncesto Fuenlabrada, quien ha conseguido hacer encajar todas las piezas del puzzle y dar la oportunidad al conjunto madrileño de poder luchar junto a Menorca y Betis por esta novena plaza.
Determinante
Como bien hemos mencionado anteriormente, el fichaje de Jordan Swing, ha traído esperanza y alegrías a un baloncesto Fuenlabrada que venía de descender de la liga ACB y rendir durante ⅔ de la temporada por debajo del nivel que se esperaba del conjunto dirigido por Toni Ten.
El escolta estadounidense con pasado en ACB en el Casedomont Zaragoza (temporada 2015-2016), desde su llegada al conjunto madrileño, ha logrado llevar a la victoria seis partidos de nueve partidos jugados, sin duda alguna, demuestra el importante impacto de Swing en la plantilla. Sin ir más lejos, solo hay que ver los números desde su regreso a la segunda competición nacional (15,2 puntos (con un gran 45% desde el T3), 3,3 rebotes, 1,9 asistencias para 14 de valoración).
Importante
Otro de los motivos del resurgir del Baloncesto Fuenlabrada es, sin duda alguna, el ala-pívot estadounidense Tanner McGrew, quien tras un inicio de temporada con un nivel por debajo de lo esperado, lo que sumado al mal rendimiento de sus compañeros, dejándole así muy solo en el momento de liderar al equipo, Tanner Mcgrew dio un paso hacia adelante y junto a Jordan Swing, han conseguido cambiar la sintonía del equipo, llegando así a extraer todo el potencial que puede dar el conjunto madrileño y que sin duda alguna, podría seguir aumentando e incluso dar algún susto en caso de ser ellos los meritorios de conseguir la novena plaza de la competición, la última que concede derecho a jugar las eliminatorias por el ascenso. Hambre de playoff en el Pavelló.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.