Torres, en el momento del podio. | Movistar Team Ecuador

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Colosal el ciclista de Ciutadella Albert Torres ayer con el dorsal 90 del Movistar Team Ecuador en la Clásica de Ordizia celebrada por la mañana. El ciutadellenc consiguió subirse al podio de esta clásica que alcanzaba su 91 edición y que está dentro del grupo de pruebas 1.1 en la UCI Europe Tour. Torres, sublime, se hizo con el Premio Sprints Especiales y se codeó con los mejores de una prueba dominada por el Movistar.

Ya vencedor en dos oportunidades anteriores (2010 y 2012), el rutero español Gorka Izaguirre consiguió ayer viernes su tercera victoria en la tradicional Clásica de Ordizia corrida sobre 170 kilómetros, en condiciones topográficas exigentes y con la lluvia como acompañante en una gran parte del trazado. La prueba, en la que Albert Torres era un debutante aventajado, tuvo un elevado nivel técnico y gran combatividad especialmente en los últimos 70 kilómetros, luego de la fuga que protagonizaron tres corredores en la primera parte de la prueba (Álvaro Robredo del Burgos BH, Mikel Aristi del Euskadi y el propio ciutadellenc del Movistar Team Ecuador quienes llegaron a tener hasta seis minutos de ventaja.

El segundo episodio de esta Clásica de Ordizia lo protagonizaron ocho corredores con dos de los fugados ante la deserción de Robredo: Mikel Aristi, (Euskadi), un crecido Albert Torres (Team Ecuador), Jonathan Castroviejo (Movistar), Omar Frayle (Caja Rural), Carlos Barbero (Euskadi) y Ricardo García (Ukyo). Y los escarabajos colombianos Dayer Quintana (Movistar) y Diego Ochoa (4-72 Colombia). Este grupo en el que pisaba fuerte Albert Torres fue cabeza de carrera por unos 20 kilómetros pero fue alcanzado y en los últimos 50 kilómetros se desencadenó una batalla sin cuartel aprovechando también que dejó de llover.

Notable papel por tanto del ciclista menorquín, cuyo próximo reto será ahora la Vuelta a Portugal, prueba de fuego para analizar su estado real de forma.