El ciutadellenc Albert Torres, el pasado jueves en la prueba de scratch, segundo por detrás del alemán Lis. | YOAN VALAT

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Albert Torres lo tiene claro. Rebosa felicidad por los cuatro costados tras dar una clase magistral en París y colgarse la plata en scratch, pero ya está. Las celebraciones, para después del Mundial. Tanto el ciclista de Ciutadella como su compañero de pista David Muntaner saben para qué están en Francia. Llevan un año paseando los maillot arco iris que ahora pretenden defender a ultranza mañana al mediodía. Para ello, han protagonizado una meticulosa preparación.

«Fue un gran día la verdad ya que siempre subirse al podio en un Mundial es muy importante y tras el campeonato se valorará pero al menos yo personalmente tengo claro que mi gran objetivo es domingo en la competición de madison». De esta manera comenzaba a hablar para «Es Diari» ayer desde el hotel de concentración de la selección española en París. Principalmente porque, como recuerda Torres, «hemos preparado este Mundial a conciencia par revalidar el título de campeones del mundo y subir de nuevo a lo más alto del podio. Tanto Muntaner como yo estamos muy bien de forma, muy compenetrados y muy ilusionados de cara a mañana».

Con todo de cara
Esta medalla de plata de scratch conseguida con certeza y fuerza vino a evidenciar el gran momento de forma por el que atraviesa Torres de cara a la gran cita de mañana. Como el mismo pistard menorquín explica, «vengo de un año en el que he entrenado bien, sin lesiones y siguiendo la programación, sin excesivas competiciones. Llegamos a la gran cita y estar en el podio será un gran resultado pero si el año pasado vencimos, este 2015 necesitamos volver al primer escalón con el oro. Conseguir el maillot arco iris es brutal», admite.

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