trujillo. El delantero mallorquín podría regresar el domingo a la convocatoria tras superar la lesión - Archivo

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Los últimos resultados que ha cosechado el Sporting, el empate en casa ante el Dènia y la derrota en Sant Boi -sobretodo ésta última-, han encendido las alarmas del club, más cuando en muchos sectores del mismo habían señalado este tramo del calendario como idóneo para asentar al equipo en la zona media alta de la tabla.

En este sentido los aficionados aprueban la marcha del equipo en estas primeras once jornadas de Liga aunque consideran que ha mostrado fases de altibajos y que con un poco más de pegada se podrían haber conseguido dos o tres puntos más que le permitirían habitar en una posición algo más desahogada.

Además reconocen la igualdad existente en la categoría, más incluso que en la anterior campaña, lo que hace difícil ganar a domicilio e impedir al equipo encadenar una buena dinámica de resultados que le aúpe a la zona noble de la clasificación.

De igual manera parte de la afición considera que esta temporada hay mejor plantilla que antaño aunque vaticinan que se pasarán apuros para conseguir la permanencia y apuntan directamente al banquillo y a un cambio para invertir la situación.

Por todo ello el encuentro del próximo domingo ante el Lleida (Municipal, 12 horas), desprende aroma de final para el grupo de Joan Esteva, que aventaja en un punto a los catalanes, está dos por encima del puesto de promoción y a tres del descenso.

De esta manera sumar los tres puntos ante el bloque de Emili Vicente se antoja vital para encarar a continuación dos citas complicadas ante el Badalona a domicilio y el Orihuela en casa, los dos primeros clasificados. Es cierto que con el preparador catalán en el banquillo el equipo siempre ha demostrado crecerse ante las adversidades y plantar cara a los rivales de entidad aunque encadenar seis encuentros sin conocer la victoria le colocaría en una situación complicada.

Para tratar de enderezar el rumbo el entrenador recupera a Marcos Jiménez y posiblemente a Antonio Trujillo, que sigue recuperándose de la rotura fibrilar en el cuádriceps. El que no estará es el sancionado Martí Noceras.