Mario. El delantero onubense, que en la imagen conecta un disparo desde fuera del área, sigue sin ver puerta como el resto del equipo - Paco Sturla

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El CE Mercadal sigue adicto a su particular crisis goleadora y sumó un nuevo empate en casa (0-0), el cuarto consecutivo, después de ofrecer frente al Campos una demostración palpable del querer y no poder, incluso después de afrontar una excelente segunda parte en la que arrinconó y acosó a su rival, pero sin lograr batir su meta ni una sola vez.

Enfrente tuvo, todo hay que decirlo, a un Campos rocoso y complicado que hizo buena su trayectoria fuera de casa, mejor incluso que en su propio terreno, que vino buscando especialmente no ver perforada su puerta y se llevó el premio de un empate sudado y trabajado.

Y eso que el partido pudo tener otro cariz muy diferente, porque antes del minuto de juego Mario Mora acarició el gol en un tiro raso que Xavi paró con dificultad. En el 20 un centro de Llor provocó un barullo en el que se pidieron unas manos de un defensor mallorquín y en el 31 Mas chutó fuerte y ajustado pero fuera de puerta.

No fue especialmente brillante esta primera mitad, con el Campos muy bien plantado en el mojado y rápido piso, mientras el CE Mercadal, que empezó animado e ilusionado, fue cayendo en los mismos errores de partidos pasados, roto en el medio campo y con un fútbol más que previsible para un rival experimentado. Lo mejor de este período fue un remate a la media vuelta de Berto que Xavi desvió de forma sensacional en el minuto 41, otro momento que hubiera podido ser clave en el partido.

El segundo tiempo se inició con dos llegadas del Campos con evidente peligro, pero luego fue un monólogo del CE Mercadal que hizo todo lo que estuvo en su cabeza y en su corazón para ganar, dominó y acosó hasta la extenuación, hasta exponerse a algún susto mortal como el que protagonizó Cifre en el 59, yéndose de la defensa pero Cristian estuvo tan rápido como oportuno para impedir el gol.

Poco a poco la persistente lluvia fue dejando el campo más pesado y ello perjudicó la entrada de los rápidos Lacueva y David Camps, que ponían más chispa en el ataque, ante un Campos que sin Jaume Vidal ni Cifre, que no habían podido con la segura zaga local en la que Jesús estuvo magnífico, ya buscaba simplemente el cero-cero final.

Y cuando faltaban cinco minutos para la conclusión llegó la gran ocasión del CE Mercadal, gran jugada por la izquierda de Lacueva, pase al centro para el remate limpio de Camps y cuando ya se cantaba el gol Xavi completó su gran actuación desviando a contrapié el balón.

Ni once saques de esquina a favor, ni el excelente fútbol de muchos minutos fue suficiente para la victoria, la inspiración del gol sigue ausente y esto ante equipos marcadamente defensivos como el Campos es un hándicap importante, aunque probablemente sea puntual y pasajero.