El CE Alaior se quedó ayer cerca de dar la campanada en la cancha del líder, el Binissalem. Un fenomenal tanto de Juanlu dio esperanzas a los alaiorencs, que se defendieron como gato panza arriba. Sin embargo, el poderoso equipo local volteó el partido (2-1) en el descuento tras un polémico arbitraje de Escribano Jiménez.
En la primera mitad, el conjunto albinegro sorprendió a los mallorquines con un golazo impresionante de Juanlu. El atacante lo hizo todo solo: robó un balón a la defensa y, desde unos 30 metros, vio al portero local adelantado y conectó un disparo que se coló por la escuadra.El premio fue tan importante como inesperado para los visitantes, a los que la meta de Montse les quedaba a años luz de distancia, dado que jugaron muy metidos atrás. De hecho, el tanto de Juanlu llegó en la única ocasión que tuvieron los albinegros en el primer período.
Con cinco hombres atrás, Marc Serrano puso el autobús ante su portería y al líder se le atragantó la disposición defensiva de su rival. El Binissalem se había acercado a la portería de Toni con peligro ya en el minuto 7, cuando el meta despejó a córner una falta que botó Oliver. Más tarde, también desbarató un contraataque conducido entre Forteza y Chus.
En la segunda parte, Riudavets dio un auténtico recital, algo que no le sirvió para salvar a su equipo, pero sí para salir ovacionado. Tras el primer gol, un tiro de Contreras que se envenenó al tocar Tomé, el Binissalem protagonizó un acoso constante a la portería de Toni. Expulsado Melià en el 81, tras coser a tarjetas al CE Alaior, el líder volteó el marcador con un gol de Óscar en el descuento.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.