En las imágenes de los resúmenes de televisión del Castellón - Sporting del pasado fin de semana se pudo apreciar perfectamente el malestar que se vive en la plantilla 'orelluda' por los dos meses y la paga extra de Navidad que el club castellonense adeuda a los jugadores, malestar que se plasmó muy gráficamente en una pancarta mostrada antes de iniciarse el partido.
Esa situación hizo recordar a más de uno que en el Sporting también hay retrasos. La diferencia fundamental con el ejemplo de Castellón es que, por un lado, la plantilla sportinguista sigue confiando en las actuaciones de la directiva que encabeza Paco Segarra y, por otro, que esta misma directiva está siguiendo el plan de pagos que planteó hace unos meses a los jugadores, basado en ir abonando cantidades en función de los ingresos que tenga el club por subvenciones públicas a partir de enero y que le proporcionen liquidez en caja. En total, la previsión para esta temporada de ingresos por este concepto ascendía a unos 363.000 euros.
De esta forma, el Sporting abonó la semana pasada a los jugadores la mitad de la nómina de noviembre que estaba pendiente y el 20 por ciento de la de diciembre. Lo que queda pendiente de pago a día de hoy es el 80 por ciento de diciembre y los meses de enero y febrero.
Obviamente, la situación no es la ideal ni desde el punto de vista de la plantilla ni del mismo club, que valora especialmente el trabajo de los futbolistas, y el presidente Segarra se ha comprometido en varias ocasiones a tener saldadas todas las deudas cuando finalice la actual temporada 2010-11.
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