Baja. Pedro Capó deberá cumplir un partido de sanción - Archivo

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A falta de cuatro jornadas para echar el cerrojo a la Segunda B, el Sporting Mahonés tiene mañana, a partir de las 12 horas ante el Teruel, una oportunidad inmejorable para tomar una bocanada de aire que le ayude a encarar los últimos partidos de la Liga.

La importancia del partido es tal que el club ha estimado, por segunda jornada consecutiva, decretar puertas abiertas para el partido, lo que significa que la entrada será gratuita.

El objetivo de la entidad es llenar las gradas del municipal de Bintaufa para que los aficionados animen a un equipo blanquiazul que llegará al encuentro con las dudas serias del capitán José Ángel Moyano y del joven lateral Omar Hernández, y con las bajas de Pedro Capó, que deberá cumplir un partido de sanción tras ser expulsado la semana pasada en Benidorm, y la de Iray Barreto, que todavía no se ha recuperado de sus problemas en la rodilla.

El Teruel llegará al municipal sin haber completado los deberes, ya que a falta de 12 puntos por disputarse el conjunto de Ramón María Calderé está a ocho del puesto que marca la promoción para mantener la categoría. La necesidad de sumar del Teruel puede dificultar todavía más el encuentro a un conjunto blanquiazul que cuenta sus últimos tres resultados por empate, que han evitado que el equipo mahonés entrara en la zona de descenso pero no han abierto suficiente brecha con el Benidorm, que está a dos puntos.

La ausencia de Pedro Capó, sumada a la duda de Moyano, dejan el centro del campo del Sporting Mahonés algo mermado, por lo que es posible que Joan Esteva devuelva al ferreriense Jeroni Coll al centro del campo, en una versión muy defensiva, junto con Raúl Vates y Méndez Canario. En el caso de que Moyano esté disponible y pueda entrar en el once, el central de Ferreries volvería a su posición en la zaga defensiva.

El Teruel no llega en su mejor momento ya que de los últimos 18 puntos únicamente ha sido capaz de sumar cinco, lo que le ha complicado la existencia mínimamente. El Benidorm, rival directo del Sporting Mahonés, juega mañana en el campo de un Orihuela que todavía pelea por entrar en el play off y que puede darle una mano a los mahoneses.