El Norteño puso ayer en un serio aprieto al CE Alaior al que derrotó en el derbi jugado en Fornells por un solitario gol en la primera parte. Tras la derrota peligra la continuidad del histórico club alaiorense en la Tercera división en la que lleva ininterrumpidamente 36 años. Afortunadamente uno de sus dos rivales más directos, ahora mismo, el Ferriolense, también cayó derrotado ayer en San Rafael (1-0).
El Norteño de Pere Vadell, ya descendido, hizo su partido y se lo llevó con un gol de Adri en el minuto 38, que sentenció al equipo albinegro. Los de David Moreno tuvieron sus ocasiones pera empatar pero les faltó suerte y acierto. El C.E Alaior pagó su mala primera parte, y con el agua al cuello, no fue capaz al menos de rascar un empate.
El encuentro empezó con muchas indecisiones por ambas partes. Los albinegros, que se jugaban la vida en el encuentro, no encontraban la fluidez necesaria para asomarse a los dominios de Toledo. El Alaior abusaba del juego directo, sin ideas en la construcción del juego, a pesar de la dupla formada por Joan Melià y Dani Marqués. La precipitación y los nervios hacían mella en el once diseñado por Moreno.
El Norteño, ya descendido y liberado de todas las presiones, intentaba irse arriba y poner en aprietos a Toni. La primera intentona del partido fue de Xavi Enrich, pero su disparo desde media distancia marchó alto. Los alaiorenses no encontraban su sitio en el césped pero Joan Melià, tras una saque de esquina, disparó con peligro aunque rechazó la zaga local.
El primer aviso serio forneller llegó a los veinte cinco minutos. José Marqués desde el centro del campo casi sorprende al meta Toni. En el segundo, los azulones no perdonaron. Fue una contra conducida por Figueroa, que cedía a Adri, y éste batía a Toni haciendo saltar a todas las alarmas albinegras.
A partir de aquí el Alaior, obligado por las circunstancias –más de tres décadas en Tercera– se fue arriba pero no consiguió su objetivo, y al final del primer acto, el 1-0 pesaba como una losa.
El segundo tiempo, el de la verdad para el Alaior, arrancó de nuevo con el Norteño avisando, pero el disparo de Badía encontró la respuesta de Toni. A los hombres de Moreno no les tocaba otra que irse arriba, ni el empate apenas les servía. El encuentro se convirtió entonces en un correcalles, en el que los dos conjuntos tuvieron sus opciones. Melià lo intentó pero un defensor local despejó a esquina.
Seguían empujando los albinegros pero los de Vadell, a la contra, en cualquier momento podían sentenciar. Dani Marqués tuvo una doble ocasión pero la suerte era esquiva a su equipo. También tuvo el segundo gol el Norteño a la salida de un córner, pero el cabezazo de Tomeu, fue salvado en la línea de gol por Juanlu.
Se le agotaba el tiempo al Alaior, crecían las imprecisiones y los nervios, y la portería de Toledo, parecía una de hockey. Juanlu tuvo el empate en sus botas por dos veces, pero cada vez ante Toledo erró. Los de Vadell pudieron sentenciar porque Badía disparó al palo y Helenio fue objeto de un claro penalti no señalado.
En los últimos minutos, los albinegros cercaron la meta de Toledo, pero sin suerte. Su técnico sorprendió a todos sustituyendo a sus dos puntas, Juanlu y Joel, y al final, el resultado fue inamovible. Alegría para el Norteño y duro palo para el Alaior.
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