Otro paso más en casa con vistas a la permanencia. El Sporting Mahonés selló ayer su segunda victoria de la temporada (1-0), en su segundo partido en casa, en un partido tosco, de oficio, en el que pecó de precipitado al principio de la reanudación, pero en el que supo mantener la calma para acabar imponiéndose con un solitario gol de Berto Vaquero en un saque de esquina a ocho minutos del final.
No fue el mejor partido del grupo de Luis Elcacho pero si que fue una prueba clara de que el Sporting ha madurado en estos tres años en Segunda B hasta tener el oficio suficiente como para esperar su oportunidad y romper un 0-0 que parecía inamovible.
Aunque no le salió barata la victoria ya que el autor del gol pasó de héroe a villano en seis minutos y fue expulsado con una rigurosa roja directa por una entrada. Uno menos para la semana que viene, al que se puede unir el lateral David Sánchez, que tuvo que ser retirado a los 25 minutos por una posible contractura y Dani Camacho, que también en los primeros minutos sufrió un pinchazo en la planta del pie aunque pudo acabar el partido.
El conjunto mahonés saltó al campo convencido de que debía borrar de la memoria colectiva el excesivo 4-0 de Orihuela. Tomó el control y achuchó al filial valencianista que contó ayer con el apoyo de unos 40 valencianistas de la Penya de Alaior, que acudieron a la cita. Ignasi, de lo mejor de ayer, le puso un balón en bandeja a Arkaitz, a los cinco minutos, que el navarro desaprovechó incomprensiblemente.
El visitante Bernat, que muy probablemente se incorpore pronto a la disciplina del primer equipo, tentó a Oliver con un chut duro al que respondió bien el guardameta.
El Valencia se adueñó de la posesión del esférico aunque el juego y la gracia la aportaron los locales. Nuevo pase de la muerte a Arkaitz que se pierde. En el 25 llegó un contratiempo importante para Elcacho. David Sánchez tuvo que dejar el campo lesionado al sufrir una contractura y entró por él Ton Alcover.
El catalán asumió el pivote, desplazando a Berto a la banda, Iray retrasó su posición al lateral y Barreda cambió de lado. Sin terminar de asumir los cambios, el filial tuvo el 0-1 en un remate de Adrián tras falló de Oliver, que Camacho sacó por los pelos en la misma línea de gol.
La expulsión, clave
A tres minutos para el descanso llegó la jugada clave. Buen balón en largo a Ignasi que fue derribado cuando iba hacia portería por Tano, el último jugador y fue expulsado.
Tras la reanudación, los locales buscaron con demasiada precipitación demostrar su superioridad numérica, lo que provocó que a raíz del juego directo los centrales visitantes se hincharan a cortar el juego.
Bajó el nivel en la segunda parte, sin ocasiones y sin un dominador claro. Pero se impuso el Sporting donde otras veces había caído. Berto conectó un cabezazo a ocho minutos del final llegando desde atrás en un córner y la estrategia sirvió para sumar en lugar de restar.
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