Gol decisivo. Toni, desde el suelo, ve como el balón que acaba de impulsar se convierte en el tanto que le dio el triunfo a su equipo - Javier

TW
0

El CE Ferreries se impuso ayer al Llosetense, por 2-1, en un encuentro vibrante que fue gobernado por los hombres de Navarrete, pero ayer Sant Bartomeu, el patrón del pueblo, apareció para ayudar a sus jugadores. Adelantó al Ferre, como no, Kaké, pero los mallorquines empataron a falta de diez minutos para la conclusión. Y en el minuto 85, Toni Pons, finalizó una contra que significó el 2-1 final.

El Llosetense desde el inicio tomó el mando de las operaciones sabedor de su superioridad, mientras los de casa se defendían. Una mala salida de Mingo a los 10 minutos casi le costó el primer disgusto al disparo de Ferragut pero por fortuna tropezó en la espalda del meta local.

Joaquín Andújar tenía bajas, y tuvo que retocar su once inicial, con la inclusión del juvenil Pepo, que debutaba en Tercera, además de otros no habituales como Tomeu, Pulido y López. Los azulgranas se iban despojando del acoso llosetí, y un pase entre líneas de Omar, a punto estuvo de llegar llegó Kaké. A los 23 minutos, Kaké, la figura local, batió a Mingo de disparo seco, 1-0. El mediapunta murciano, anotó su octavo gol en la Liga.

El tanto azulgrana dibujaba el escenario deseado por Andújar. Adelantarse en el marcador, estar fuertes en defensa, y liquidar al rival en una contra. Pasada la media hora volvió a acercarse el Llosetense a Mingo, y Crespí fue derribado por un defensor en el área, sin que el árbitro lo advirtiera. Bosch tuvo el segundo, tras asistencia de Kaké, pero su disparo salió alto. Los últimos minutos de la primera parte fueron de claro dominio de los hombres de Navarrete, pero la más clara de nuevo fue para los locales. Una falta lateral botada por Joshua, por poco no significó el segundo gol. Buena primera parte del Ferreries.

En la reanudación, la primera llegada fue de los mallorquines, pero Mingo le adivinó la intención a Ferragut. Transcurrían los minutos y el cuadro de Lloseta acentuaba su dominio. El monólogo visitante inquietaba a la parroquia local que intuía la llegada del empate. En el minuto 63, más problemas para el Ferreries con la expulsión de Joshua al ver la segunda amarilla con casi media hora por delante.

Andújar no paraba de dar órdenes. Cladera, de cabeza, rozó la igualada. Los visitantes tenían a su merced al Ferre y fallaban continuas ocasiones hasta que llegó el empate en el minuto 81 por medio de Hugo. La insistencia de los llosetins había encontrado la merecida recompensa.

Tras el empate, cuando todo parecía finiquitado, una salida a la contra de los azulgranas la finalizó Toni estableciendo el definitivo 2-1, y la afición estallaba de júbilo. El tiempo extra fue interminable debido a que los mallorquines insistían pero los locales aún gozaron de alguna ocasión para ampliar la renta. Al final alegría desbordante y tres puntos importantísimos para los hombres de Joaquín Andújar.