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Tanto Penya Ciutadella como Mercadal se encuentran en los últimos preparativos de uno de los derbis que más expectación ha creado últimamente en el fútbol menorquín de la Tercera División. El hecho de que gualdiazules y rojiblancos sean los únicos representantes de la isla en la categoría de bronce reafirma esa idea
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Será la segunda vez en la historia que ambos conjuntos se enfrenten en Tercera -la primera en Son Marçal- y ahí interviene el recuerdo que unos y otros tengan del único precedente, el partido de la primera vuelta en Sant Martí. Partido que finalizó con un polémico 2-1 favorable a los mercadalenses, con ciertas decisiones arbitrales discutibles y algún que otro rifirrafe.

Todo ello, con el aderezo ineludible de que un derbi es un derbi, y de que, no hay que olvidarlo, se trata de que unos y otros empiecen a certificar su permanencia. Los puntos ya empiezan a ser muy caros a estas alturas de la temporada.

Igualados en la tabla, las dinámicas son las que estarían marcando las diferencias en estos momentos. El Penya estaría algo "deprimido", mientras que el Mercadal habría encontrado una vía más optimista a su momento.

Quizá por ello, Dani Mori -que tiene las dudas de Salido y Castro, ambos con esguinces- espera "ver la mejor versión de mis futbolistas. Cuando van con convicción son imparables. Tengo plena confianza en ellos y pido a la afición que les apoyen".

Enfrente, Yeray Rodríguez -que convoca a toda su plantilla menos a Fedelich-, espera "un partido bonito de jugar por la calidad de ambos" y piensa que "es importante tener la mente fría en los momentos clave y dominar los miniciclos".