David Camps, autor del gol local, en una acción ante el meta de la Peña Deportiva Santa Eulàlia | Josep Bagur Gomila

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El Penya Ciutadella acarició ayer un triunfo de prestigio ante la Peña Santa Eulália. La injusta expulsión de Raúl fue clave para que el cuadro ibicenco se llevara los tres puntos de Son Marçal. Los hombres de Dani Mori realizaron un encuentro muy serio y fueron capaces de anular los puntos fuertes de su oponente. Se adelantó el Penya con gol de David Camps y tuvo opciones para liquidar el partido, pero tras la citada expulsión del centrocampista ferrerienc, los pitusos aprovecharon la coyuntura para llevarse el choque.

Comenzaron los locales apretando a su rival y en los primeros minutos tuvieron las primeras ocasiones. Un disparo de Raúl fue despejado por la zaga a saque de esquina. También avisaron los visitantes con un centro de Ayrton cabeceado al larguero por Paolo. La defensa ibicenca no andaba muy firme, y una indecisión de los centrales, fue aprovechada por David Camps para anotar el 1-0.

Los locales se crecieron tras el gol y llevaban la manija del encuentro.

Pero los hombres de Mario Ormaechea poco a poco fueron despertándose de la siesta, y en dos zarpazos rozaron la igualada. Un error del meta Jesús habilitó a Salinas y José salvó en la línea despejando a córner. Acto seguido un centro de Fofi fue rematado por Salinas, de nuevo al palo. Tras los dos sustos del Santa Eulália, los locales volvieron hacerse con el control del match, llegando al descanso con el esperanzador 1-0.

La segunda parte arrancó con un disparo de Camps, que Seral atajó. La Peña intentaba irse arriba en busca del portal defendido por Jesús, pero los locales muy bien plantados sobre el rectángulo de juego evitaban sus llegadas. Un golpe franco ejecutado por David Camps se fue rozando la escuadra de la meta de Seral.

El Penya contenía las tímidas acometidas de su rival y solo se divisaba peligro en jugadas de estratégia. Una falta botada por el cuadro pitiuso la rozó Rubén y supuso el gol del empate.

Dos minutos más tarde, llegó la injusta expulsión de Raúl, al ver la segunda tarjeta amarilla, rigurosas ambas. El Penya debía afrontar los últimos 12 minutos de encuentro con un hombre menos, y fue determinante. Los hombres de Dani Mori perdieron el control del choque y el Santa Eulália, con un hombre más, lo aprovechó. Un centro de Gómez lo cabeceó Salinas, superando a Jesús anotando el definitivo 1-2 que no se correspondió a los méritos de unos y de otros, que acabaron con un excesivo premio para la Peña.