José Enrich, autor del primer gol ciutadellenc, pendiente en la imagen de un avance local | Teresa Ayuga

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El Penya Ciutadella encajó la tercera derrota en otras tantas salidas a domicilio en lo que llevamos de temporada, eso sí, ante otro de los gallitos de la categoría -Mallorca B, Binissalem y ayer, Constancia-. El equipo menorquín pecó de inexperiencia por las bajas, lo que aprovechó el Constancia para encarrilar el partido con dos tantos en apenas cinco minutos. Antes del descanso, la jugada clave, un gol en el que los visitantes reclamaron fuera de juego y mano, que dejó el marcador muy cuesta arriba para la reanudación. Pere Vadell introdujo variaciones para dar otro aire al equipo y la imagen fue otra más intensa y de profundidad en ataque. José Enrich recortó distancias con un gol espectacular. El intercambio de 'golpes' acabó con un 5-2.

El inicio del encuentro tuvo claro color blanquinegro, con un gol de José Bueno tras un saque de esquina y otro de Chus Seco tras un rechace y superar en el mano a mano a David Camps, los dos en apenas quince minutos de juego. El colectivo de Son Marçal reaccionó con un disparo lejano que obligó a Sergio a lucirse y con un barullo dentro del área que Eric Mercadal estuvo a punto de aprovechar, dos jugadas aisladas pero que podrían haber dibujado otro encuentro. Sin embargo, la realidad fue otra. Al borde del descanso el Constancia anotó el tercero mediante Xisco Garí, en presunto fuera de juego y tras una mano de Seco, una doble infracción que protestaron enérgicamente los ciutadellencs. En vano.

El paso por los vestuarios obligó al técnico de Es Mercadal a mover algunas piezas. Introdujo un doble cambio que dotó de más profundidad en ataque y agresividad en el centro del campo, que dificultó el juego rival. A los once minutos, el guión se ciñó al plan previsto con un disparo de José desde lejos que se estrelló en el travesaño y se introdujo en la portería tras impactar en Sergio.

El Penya Ciutadella creyó en sus posibilidades e intensificó la presión y la presencia en el área rival, aunque sin concretar una segunda diana que habría devuelto la ilusión y las opciones de sacar un resultado positivo. Esas esperanzas se desvanecieron en el 89 con el cuarto tanto de los de Guiem Llaneras, un disparo desde fuera del área de Paco Plata. En tiempo añadido, hubo tiempo para que Carlos Febrer y Joan Busquets, éste desde los once metros, dejaran el tanteador en el definitivo 5-2.