El Mercadal, con Jesús a la cabeza, fue un frontón en defensa, pero en ataque no brilló y al final sumó un punto | MIQUEL A. BORRÀS

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El CE Mercadal rompió la dinámica de dos derrotas consecutivas a domicilio en Liga -Penya Ciutadella y Alcúdia- con un empate sin goles en su visita al campo del recién ascendido Santa Catalina.

El bloque de Lluís Vidal, ayer de amarillo, se mostró sólido en defensa y apenas concedió ocasiones de gol al rival aunque en ataque tampoco se prodigó en exceso. El equipo, además, dejó el casillero de goles en contra nuevamente a cero por segunda semana seguida, en gran parte gracias a la actuación de Jesús, que nada más volver tras el paso por los vestuarios, acertó a detener un lanzamiento desde los once metros ejecutado por Rubio y que pudo dibujar un escenario bien diferente para los intereses menorquines.

El inicio del encuentro fue para los locales, que trataron de imponer esa condición y el factor campo para intentar encerrar atrás a los de Sant Martí y avanzarse en el marcador. Sin embargo, tan sólo inquietaron al meta ciutadellenc con acciones lejanas, una falta frontal que Blázquez envió directamente fuera y un disparo del propio delantero que Jesús repelió con alguna dificultad.


Control

Pasado el cuarto de hora, la salida impetuosa de los de casa tocó a su fin y el Mercadal empezó a hacerse con la zona ancha del campo y con el control del balón, avisando con un remate de Izan a centro de Pepo que se perdió, por poco, cerca de la escuadra. El equipo trató de desactivar la defensa una y otra vez, entrando tanto por las bandas con Izan y Franco como con balones directos a David Mas, pero sin éxito. Sólo Robert con un intento de vaselina a poco del final del primer tiempo puso la incertidumbre en la grada de Son Flo.

La reanudación tuvo el mismo guión que el inicio del duelo. Los de Carlos Martínez volvieron a poner una marcha más de salida para tratar de sorprender al rival y a punto estuvieron de conseguirlo cuando un disparo impactó en un jugador menorquín y el colegiado decreto penalti por manos. La decisión fue muy protestada por los visitantes, que sostenían que el balón había golpeado en el costado del jugador y no en el brazo.


El capitán del Santa Catalina, Rubio, fue el encargado de ejecutar la pena máxima, a la izquierda de Jesús, que adivinó su intención y detuvo el lanzamiento. El partido volvió a equilibrarse y el Mercadal trató de pronunciarse en ataque, gozando de una buena oportunidad en el minuto 59, cuando un balón desde la banda izquierda lo prolongó Izan, en el corazón del área, para la llegada de Robert, que golpeó arriba en la mejor acción de los de Sant Martí en los segundos cuarenta y cinco minutos. Lluís Vidal dio oxígeno al centro del campo con la entrada de Marcos y Raúl y manejó los instantes finales sin recibir sobresaltos aunque tampoco pudo profundizar en campo contrario. Al final, reparto de puntos que permite a los rojiblancos volver a sumar tras dos tropiezos seguidos lejos de casa, un punto que deberán hacer bueno el próximo domingo en Es Mercadal ante la Peña Deportiva Santa Eulària.