El delantero rojiblanco Cris intenta llevarse el esférico por elevación, en plena pugna | Josep Bagur Gomila

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El Mercadal dio un paso atrás este sábado en Sant Martí, en su afán de tener una temporada sin sobresaltos. Los hombres de Lluís Vidal anduvieron muy blandos en defensa circunstancia que fue aprovechada por el Binissalem, un conjunto experto en la categoría.

Aparte de las lagunas defensivas, los locales estuvieron muy espesos en su juego. El técnico local dejó en el banquillo a Marcos y David Mas, debido a las molestias que arrastraban, y a Biel Villalonga, por idéntico motivo en la grada. En una plantilla corta de efectivos, se notó.

Además de los motivos citados, el Mercadal no tuvo en ninguno momento atisbos de poder superar a los hombres de Tomeu Pons, que simplemente fueron mejores, y se supieron aprovechar las facilidades de la zaga rojiblanca en dos de los dos goles encajados.


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