Imagen del duelo vivido este pasado fin de semana en el Municipal de Sant Martí entre Mercadal y Llosetense | Katerina Pu

TW
1

«El equipo ahora está en una dinámica negativa y si hay un culpable, este soy yo». Fueron estas palabras del preparador mahonés, Lluís Vidal, después que su CE Mercadal cosechara la tercera derrota consecutiva en la Tercera RFEF, primer tropiezo en el Municipal de Sant Martí ante un buen Llosetense (0-2) que además deja a los rojiblancos al borde del abismo, a un solo punto del descenso a Liga Regional. Este Mercadal no termina de encontrarse en la Tercera 2022-23 y suma tan solo 7 puntos. Y lo que es más alarmante, lejos de Menorca todavía no sabe lo que es ni ganar, ni perforar la portería de sus rivales, incapaz de hacerlo en sus salidas a Andratx (2-0), Constància (3-0), Manacor (1-0) e Independent (2-0).

La alarmante falta de gol de los rojiblancos es una losa demasiado grande a día de hoy para los de Vidal, quienes, a excepción de en Inca y quizás este pasado sábado, han competido cara a cara con todos sus contrincantes. Sin embargo, la realidad es que es el cuarto peor equipo en ataque, con solo seis goles en ocho encuentros, solo por delante de Platges, Portmany y Sóller. Su máximo goleador es Ignasi Dalmedo y el joven Xavi Fedelich, con dos dianas cada uno.

Y es que el Mercadal acumula tres partidos seguidos sin celebrar gol alguno, lo que evidentemente merma las opciones ante equipos de calidad y curtidos como son prácticamente todos este año en Tercera, con solo 16 representantes. La última victoria mercadalenca se remonta al 8 de octubre, en casa ante el Sant Jordi (2-1). Desde entonces, un tropiezo tras otro que arroja un preocupante balance de 2-1-5, disputado ya prácticamente el primer tercio de liga.

El presidente, muy tranquilo

Con la mente puesta ya en la gran final que vivirán este domingo en el feudo del Sant Jordi, colista de la categoría con solo dos puntos, Toni RiudavetsVila, llama a la calma. Este mismo lunes, desde «Es Diari», exclamaba el máximo mandatario que en la directiva y la entidad, «reinan la calma. Personalmente estoy muy tranquilo de la situación y pese a haber sumado tres derrotas seguidas; si bien reconozco que este domingo sí hay que sacar los tres puntos o sí podría empezar a preocupar», señalaba el presidente rojiblanco.

Poco después del encuentro del sábado, Vila y el entrenador, Lluís Vidal, dialogaron sobre el momento delicado del equipo y la última derrota, «inesperada, porque teníamos mucha ilusión», abundaba el directivo. «Vidal está más fuerte y seguro que nunca, convencido de sacarlo adelante. Como lo estoy yo de que si alguien debe hacernos reaccionar, es él», exclamaba Vila, que jamás se ha planteado cambio alguno en el banquillo ni ningún ultimátum. «Vidal es un gran profesional e insistente en el fútbol y buscará la manera de hacernos reaccionar».

El presidente mercadalenc insistía este lunes en que la seguridad reina en Sant Martí, a pesar de estar a un punto del precipicio. «Tenemos equipo, estamos seguros, para salvarnos sin problema alguno y además, estamos a un par de victorias de la quinta plaza, tenemos tiempo y plantilla», proseguía Vila, quien en ningún momento cree que el mensaje de inicio de curso de Vidal– de poder quedar con los de arriba­– haya añadido presión a la plantilla. «Si el ‘míster’ lo dijo es porque lo ve así y lo siente y estoy convencido que en su interior todavía lo piensa».

Finalmente, Vila confirmaba que en ningún momento el entrenador le ha exigido fichajes, por la marcha del equipo y la baja «sensible» de Izan Canet. «Para nada y además, tendría que ser alguien que viniera a sumar y, de momento, no se mira nada».