Entre los muros que rodean a la ciudad deportiva de Son Bibiloni se levanta una fábrica de porteros, con algo de acento menorquín. Aunque el camino para llegar al primer equipo del Mallorca sigue siendo bacheado y complejo, el nivel de técnicos y futbolistas, cada vez más profesionalizados, crece año a año en una cadena continúa de producción y aprendizaje que empieza en los benjamines y acaba en el filial. En la última temporada hasta 25 guardametas han ido forjando ahí su estilo, su personalidad y su carácter. Cuatro de ellos ya son internacionales. Otros lo acabarán siendo en breve. Y entre ellos, dos menorquines: el juvenil de Maó, Àlex Quevedo, a caballo entre el Segunda RFEF y el División de Honor Juvenil este año. Y Josep Mercadal, de Ferreries, en edad cadete.
Los menorquines Álex Quevedo y Josep Mercadal, metas del futuro del RCD Mallorca
El club trabaja en Son Bibiloni en la formación de 25 guardametas entre ellos, los insulares
También en Deportes
- Crecen los particulares que alquilan sus coches en Menorca para enfado de los 'rent a car'
- Los propietarios de Binibèquer Vell activan este miércoles la reducción del horario de visitas
- El Correllengua reivindica el català a Menorca: «Mantenir la nostra llengua és un deure»
- El aviso del profesor Gabriel Cardona: «Si Menorca no responde, perderá el Grado de Ingeniería»
- Ciutadella repara en Cala en Brut el ‘replà’ destrozado por un temporal y advierte de los saltos
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.