Juan Carlos Fuentes, presidente de la Federación Balear de Piragüismo. | FBP

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El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) ha dejado sin efecto la sanción impuesta en su día al presidente de la Federación Balear de Piragüismo (FBP), Juan Carlos Fuentes, que fue inhabilitado por parte del Comité Nacional de Competición y Régimen Disciplinario de la Real Federación Española de Piragüismo (RFEP) por espacio de dos años al considerar que se habían cometido una serie de irregularidades relacionadas con la expedición de licencias o en documentos necesarios para su creación, tras la denuncia presentada por tres entrenadores, que reclamaron haber sido dados de alta sin su conocimiento.

Fuentes recurrió ese fallo al propio TAD, que meses después le ha acabado dando la razón en el contencioso abierto, anulando el fallo inicial del Comité de Competición. De esta manera, la resolución del TAD estima el recurso presentado por Fuentes, como presidente de la FBP, alegando que, «por mucho esfuerzo argumentativo de la resolución sancionadora, y del informe ante este tribunal no se acredita la concurrencia de una actuación dolosa por parte del hoy recurrente ya que la existencia de perjuicio, que se da por el hecho de la emisión de licencias incorrectas, no puede derivarse una responsabilidad objetiva, sino que dicha responsabilidad debe acreditarse y probarse en el seno del expediente», toda vez que el Comité Nacional de Disciplina y Régimen Disciplinario, dio por válidas todas las acusaciones sin que los denunciantes tuvieran que presentar prueba alguna en apoyo de sus pretensiones.

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De esta manera, el TAD declara nula la sanción de inhabilitación de dos años contra Fuentes, a través del Expediente 86/2021 BIS. Un fallo que agota la vía administrativa, aunque contra el mismo todavía se puede interponer recurso Contencioso-Administrativo en un espacio de dos meses.

Esa inhabilitación con la que fue sancionado por la RFEP no impedía a Fuentes poder seguir realizando sus funciones como presidente de la Federación Balear de Piragüismo, contando con el apoyo a nivel legal y por escrito de la Direcció General d'Esports.