Urko. El pívot del Menorca, puesto como ejemplo por el presidente, en una acción ante Woods

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M.J.U. Maó
Fichaje de Marcus Faison, destitución de Ricard Casas, contratación de Javier Imbroda, llegada de Fred Weis y consecuente despido de Vladimir Boisa. Esta es la secuencia de medidas determinantes que han adoptado los responsables directivos y técnicos del Menorca Bàsquet en el último mes y medio con el propósito de relanzar a un equipo perdido en las cavernas de la clasificación.

Sin embargo, ninguna de ellas hasta el momento se ha traducido en el efecto deseado y el plantel sigue acumulando derrotas por un camino que le lleva directo hacia el descenso. Por ese motivo, al margen de que lleguen o no los fichajes inminentes de jugadores contrastados (un pívot y un escolta que el club esperaba haber cerrado ya ayer), el punto de mira está puesto ahora en los actuales moradores del vestuario.

La actitud de algunos jugadores el pasado domingo en Zaragoza soliviantó al presidente, José Luis Sintes, y a algunos directivos presentes en el Pabellón Príncipe Felipe. A raíz de este último encuentro, el máximo mandatario citó el pasado lunes por la tarde a los dos capitanes del equipo, Mario Stojic y Urko Otegi, y al entrenador Javier Imbroda, en presencia del director general, Sunil Bhardwaj. De esta reunión salió el mensaje claro del presidente dirigido al vestuario. Sintes no quiso explicar el contenido de este encuentro con los capitanes aunque sí informó que "el próximo domingo veré si ha servido de algo lo que les dije", aunque aseguró que "yo ya no tengo necesidad de advertirles".

Las próximas medidas a adoptar por la cúpula del club irán directamente enfocadas a las nóminas de los jugadores en vista de su pobre rendimiento aunque Sintes no quiso confirmar ni desmentir este extremo. La cuantía de la multa se aplicaría en la reducción de un 10 por ciento en las fichas de cada jugador, y así fueron informados ayer los jugadores por sus dos capitanes.

José Luis Sintes ya criticó la actitud de algunos de ellos tras el partido en Zaragoza y dejó claro que si no empujaban todos sería imposible obtener la salvación".

Se ha cansado el presidente de leer y escuchar las declaraciones de los jugadores en los que no escatiman palabras para asegurar lucha, entrega, esfuerzo y compromiso del primer al último segundo del partido, para que posteriormente no se vean reflejados en los partidos. Es por ello que la próxima medida a adoptar pase por el recorte en sus emolumentos. "Hubo jugadores que salieron amarillos a la pista y no me vale que hayan perdido confianza en ellos mismos por los motivos que sean, porque si en su día quisieron renovar por dos años lo hicieron con conocimiento de causa", indicó ayer, José Luis Sintes a este diario.

Urko: "El que sea egoísta y piense por encima del equipo no merece jugar"
Urko Otegi, a quien el presidente destacó por su esfuerzo y actitud en el partido ante el CAI, indicó ayer a través de la web del club en relación al reparto de minutos que efectúa el entrenador, Javier Imbroda, que "el que sea egoísta y piense en sus intereses personales por encima del equipo es el que no se merece jugar. Estamos concienciados de que lo más importante es el equipo, la institución y la isla y esas son las prioridades de los jugadores".

Urko asume que "el vestuario no está bien, pero como peor no lo podemos hacer -porque llevamos 10 derrotas consecutivas- hay que levantar la cabeza y pensar en una victoria ante Fuenlabrada que nos elevaría la moral. El equipo no está jugando tan mal como para estar en esta situación"

De cara a ese choque vital ante el Fuenlabrada, el pívot donostiarra le pide a los aficionados que "no piensen en la LEB. Somos conscientes de su dolor porque no es agradable verles llorando después del partido de Zaragoza. No les estamos dando nada pero sólo les podemos decir que deseamos ganar el partido para dedicárselo a ellos". Del mismo modo, Otegi admite que tantas derrotas consecutivas hacen que "ahora todo el mundo -incluidos nosotros- lo veamos negativo, pero si ganamos un partido recuperaremos las buenas sensaciones, confianza y animo para ver las cosas de otra manera, nos dará moral para afrontar los partidos sobre todo de casa y cambiar la situación".

Todos en el vestuario saben, afirma que Urko, que "tenemos que crear una química especial y salir a la rueda de calentamiento con ganas de que el rival vea que vamos a por el partido porque cada día quedan menos oportunidades. No podemos dejar escapar más partidos en casa y hay que estar a tope. Nosotros somos los que hemos ido ganando de 7 en Zaragoza o que dominábamos al Gran Canaria en el primer tiempo así que podemos sacar esto adelante y si viene alguien bienvenido sea. Hay que tener paciencia para sacar esto adelante en el tiempo que queda".