Julián. El defensa del Alaior, que sería expulsado, salta por un balón junto a Héctor Carreras - Cris

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El Ferreries toma oxígeno a costa del Alaior (3-0). El equipo de Antonio Asensio, superior a los albinegros a lo largo de los noventa minutos, aprovechó la expulsión de Julián Calzada, nada más arrancar el segundo tiempo, para anotar tres goles y teñir el derbi de color azulgrana. La diferencia podría haber sido incluso más amplia si David Melià no hubiera desperdiciado una penalti. Tres puntos que permiten coger aire a los locales en la tabla en detrimento de un Alaior que ayer sumó su séptima derrota seguida y ve como la distancia con los puestos de descenso se sigue reduciendo. El Ferreries ganó además el gol average particular con los de Joaquín Andújar tras el cuatro a uno registrado en Los Pinos en la primera vuelta.

La primera parte no tuvo mucha historia. Los locales salieron decididos a por el partido desde el primer minuto mientras el Alaior esperó su oportunidad a la contra. Dani Marqués, con molestias durante la semana, fue la gran novedad en el once inicial formando pareja en el centro de la defensa junto a Julián Calzada.
La primera ocasión del partido fue para Héctor, que conectó un remate de cabeza tras un disparo defectuoso de David Pons que Toni mandó a córner. El balón fue de un lado a otro sin un dominador claro hasta que Juli entró en juego y dos acciones suyas a punto estuvieron de desnivelar el marcador. La primera, una internada por la banda tras robarle el balón a Dani Marqués que Robert no pudo empujar a la red en el segundo palo. La segunda, un mano a mano ante Toni que el meta desvió a córner. Entre medias la única acción de peligro visitante en la primera parte, una falta lateral que botó Joan Melià y Dani Marqués, anticipándose a Mingo en su salida, remató alto. Con igualdad en el marcador y sensación de mayor peligro en el bando local se llegó al descanso.

La segunda parte empezó como la primera, salida en tromba de los locales y jugada clave para el posterior devenir del partido. Tras una buena acción colectiva, el balón llegó a Juli, que en inmejorable posición para marcar fue agarrado por Julián Calzada. El colegiado decretó penalti y el defensa, que reaparecía tras cumplir un partido de sanción, vio la roja y dejó a los suyos con diez. David Melià fue el encargado de lanzar pero Toni acertó su lanzamiento. Si hasta ese momento el dominio era local, la expulsión no hizo sino aumentar esa sensación. Poco después, David Pons, a la salida de un córner disparaba raso desde la frontal y batía a Toni, plasmando en el marcador lo que sucedía sobre el terreno de juego.

A partir de ese momento, los albinegros, obligados a buscar el empate, estiraron las líneas y gozaron de un par de acciones para nivelar el encuentro, en la cabeza de Dani Marqués y en la botas de Calero aunque sin suerte.

El Ferreries respondió con un disparo alto de Héctor y otro de Bosch que detuvo Toni, preludio de lo que iba a suceder.

Dos zarpazos de los azulgranas en la recta final del choque acabaron con las esperanzas de los alaiorenses por arañar algún punto de Sant Bartomeu.
De nuevo David Pons, en una acción parecida a la del primer gol, volvió a disparar desde la frontal y su lanzamiento impactó en esta ocasión en un defensa albinegro desviando la trayectoria. Con el Alaior a la desesperada y Dani Marqués como delantero, el Ferreries aprovechó un rápido contraataque para cerrar el partido. Bosch ganó la espalda a la defensa, se plantó ante Toni, le regateó y marcó el tercero, rubricando un triunfo importante de cara a lograr la permanencia.