Calero. Marcó el primer gol del Alaior, de cabeza - Diario de Ibiza

TW
0

Zarpazo definitivo el que dio ayer el Alaior en Sant Rafael donde repitió el triunfo (0-2) obtenido el sábado en Campos, que le asegura prácticamente la salvación.

Los hombres de Andújar y Lito Alzina se hicieron fuertes ante el otrora revelación de la Liga en partido aplazado de la jornada 32 y se sitúan ya 8 puntos por encima de la zona de descenso.

El Alaior sorprendió al cuadro de Ormaechea al aprovechar perfectamente las dos ocasiones de que dispuso para llevarse los tres puntos del municipal rafeler. El plantel pitiuso fue el que llevó el mando del partido, pero cometió un error grave en la marca en el 0-1 y acabó pagando sus prisas con el segundo tanto.

El cuadro alaiorense esperó agazapado atrás. Durante el primer cuarto de hora, el bloque pitiuso llegó a la meta rival en tres ocasiones que abortó Toni Riudavets que detuvo los lanzamientos.

A los 20 minutos David Mas caía en mala postura y se fracturaba la clavícula, por lo que era sustituido por el incisivo Aitor.

El Sant Rafel se dedicó a coleccionar saques de esquina en el tramo final de la primera mitad, pero quedaron en nada.

El tiempo de asueto sentó mejor a la escuadra alaiorense que a la rafelera. Las necesidades clasificatorias acuciaban a los albinegros, que intentaron estirar líneas y buscar con más ahínco la portería de Javi Seral. La iniciativa en el control del esférico del equipo local decayó. Pero cuando más tenía controlado el partido el cuadro pitiuso, el Alaior asestó el golpe del partido. Una falta botada por Dani Marqués desde 40 metros la remató de cabeza Calero ante la pasividad de la zaga ibicenca, que se quedó parada.
La ocasión más clara del conjunto rafeler la desperdició Carlos Fernández, que no acertó a rematar un balón suelto dentro del área a 13 minutos del final.

Pero en una contra Aitor se marchó de Adrián Rosa y de Dani y se plantó solo ante Seral cruzando el balón lejos del alcance del portero. Asimismo, Tiago tuvo en sus botas el tercero al marcharse de los defensas locales, pero se aturulló ante Seral. El Alaior conservó el triunfo y la victoria que vale la permanencia.