Quien bien empieza...

En un partido que derramó tensión, carácter y enormes dosis de pasión, el equipo menorquinista, a partir de un trabajo defensivo colosal, halló su momento para apartar a su enemigo en el último tramo lo que le permitió convertir los dos minutos finales del choque en una fiesta para su afición.

El Menorca bloqueó el temible perímetro de los canarios que sólo anotaron 4 triples de 18 intentos, equilibró el rebote (34 a 37) y redujo las estadísticas de los dos MVPs de la Liga, Donaldson y Guillén, aunque el primero se perdió casi 10 minutos de juego por una brecha en la ceja.

Como consecuencia, la serie arranca con una ventaja notable por aquello de la trascendencia del primer partido, que en todo caso no debe confundirse con una accesibilidad del rival. La Laguna enarboló el pañuelo blanco los dos últimos minutos del juego, pero hasta entonces dio todas las sensaciones de poder ganar el encuentro. Un objetivo que perseguirá mañana domingo antes de regresar al Archipiélago Canario.

Engañoso fue el nacimiento del encuentro porque el ViveMenorca atacó las líneas de pase de La Laguna y defendió con solvencia el perímetro para liderar el partido (8-2 a 6'46). Ni Cage ni Rost hallaban la manera de soltar el brazo ante la defensa presionante del grupo de Olmos. Y por eso apareció el MVP nacional de la Liga. Richy Guillén, asistido por Donaldson hasta que una brecha en la ceja sacó a éste del partido. Guillén sobrepasó a Caio Torres e inició el avance de La Laguna. Un parcial de 0-10 puso a los canarios por delante (8-12). Alejandro Martínez recurrió a Chagoyen para cubrir la ausencia de Donaldson y Paco Olmos no encontró alternativas al dominio del rebote y la pintura de su oponente. El parcial se alargó al 4-19 (12-21) pero el recurso de Urko Otegi frenó la hemorragia y cuatro puntos del vascos permitieron parar el marcador en 16-21.

No mejoraron las prestaciones ofensivas de un Menorca absolumente errático en la reanudación. Como mal menor, La Laguna perdió su efectividad en el poste bajo y el marcador se fue de vacaciones tras el nuevo estirón de los canarios (16-25) en cuatro minutos de juego. Olmos tuvo que buscar soluciones y las encontró primero con Marc Fernández, que fue el revulsivo, y poco después con Victor como '4' en la pintura para defender a Donaldson, ya reintegrado al parquet. Dos triples del catalán acercaron el marcador y el Menorca colocó un parcial de 12-5 (28-30) hasta el punto que Diego Sánchez se jugó un triple para culminar la remontada. No entró y una canasta final de Cage situó el 28-32 al descanso.
Salió rearmado el Menorca con su quinteto titular para equilibrar el partido en seguida (32-32). Y Umeh elevó la temperatura ambiente con una nueva canasta que devolvía la supremacía en el marcador (35-34). Victor cometía su tercera falta personal y se iba al banco cuando La Laguna había vuelto a imponer la polivalencia de Donaldson (37-43, a 5 minutos del final del tramo) y el propio Guillén.

Con los menorquinistas cargados de faltas, Turner y Umeh asumieron las responsabilidad. El escolta nigeriano se encargó de volver a voltear el marcador con 5 puntos consecutivos (44-43). Olmos puso en liza a Montañana para evitar una nueva avanzadilla de Guillén y la batalla particular entre ambos resultó tremenda, tanto como el partido que entraba en su último tramo con un incierto 50-49.

Un triple de Diego Sánchez marcó el camino del triunfo al inicio del cuarto definitivo. El ViveMenorca aumentó la intensidad de su defensa hasta desarmar a La Laguna que no hallaba pase ni tiro. La tensión se desbordaba en el Pavelló lo que propició que ambos equipos se pasaran casi cuatro minutos sin anotar con 55-51 en el marcador. Victor y Caio neutralizaban ahora sí a Donaldson y Guillén y a 3'31 del final llegó el momento de dar el zarpazo definitivo a este primer asalto de la eliminatoria.

Los mahoneses arrastraron un parcial de 9-2 (62-53) tras una penetración de Guzmán, y un triple de Victor a poco más de dos minuto para el final del encuentro que de esta forma, quedó inesperadamente decidido sin la incertidumbre final que se preveía.

Quien da primero da dos veces, dice el refranero. Y en esa tesitura se hallará mañana el ViveMenorca para aproximarse otro pasito más al sueño del ascenso.

"Si el equipo se cree que lo ha dado todo, daremos un paso atrás importante"
"Lo más importante es que empezamos la serie con defensa". Así de contundente se mostró Paco Olmos, técnico del ViveMenorca, nada más llegar a la rueda de prensa posterior a la victoria de su equipo. "Es importante para nuestro baloncesto porque hemos defendido muy bien ante un equipo muy físico y nuestro perímetro apenas ha dejado tirar cómodo a sus excelentes tiradores", valoró Olmos.

Otro aspecto que quiso remarcar el entrenador valenciano fue "el gran desgaste físico de los cinco jugadores interiores, que creo que es una serie en la que Urko, Caio, Turner, Montañana y Victor tienen que hacer un gran trabajo sobre su par". El punto negativo que Olmos le vio a su equipo fue "que en la primera parte tuvimos un punto de ansiedad y precipitación en ataque, donde quizás trasladábamos la energía que utilizábamos en defensa".

Así mismo, Paco Olmos admitió que "en la segunda parte corregimos esa ansiedad, encontramos el equilibrio" y añadió que "también influyó el factor público" y aseguró que "ahora la receta que nos queda es recuperar cuanto antes la energía, porque ha habido mucho desgaste". "Si La Laguna quería ganar hoy, seguro que el domingo echará el resto, por lo que debemos estar muy armado", dijo Olmos.

Sobre el fantástico ambiente que registró el Pavelló Menorca, el técnico dijo que "es fundamental y supongo que el domingo se lo pondrán un poco más difícil". Además, Olmos aseguró que "el equipo siempre tiene que dar más porque si se cree que lo ha dado todo, daremos un paso atrás importante".

Por su parte Alejandro Martínez, técnico visitante, consideró el partido un "calco" al de la fase regular donde "hicimos lo que teníamos que hacer pero con demasiadas pérdidas".