Satisfacción contenida en el técnico manchego del Valeriano Allés, Chema Rodríguez, al término del intenso partido que acababa de disputar su equipo en tierras germanas. Después de más de dos horas de juego.
Lejos de dejarse llevar por la euforia del momento, el técnico manchego no dudó en calificar el partido de su equipo como "muy malo en todas las líneas, no nos ha salido nada aunque por fortuna en el set de oro, hemos introducido dos variaciones tácticas y nos ha salido bien". Se refería Rodríguez a la posición de Ana, como opuesta, y de Vita, como central. "Había que hacer algo que fuera un revulsivo porque no nos había funcionado nada, era la opción táctica que me quedaba y además, cogíamos de sorpresa al otro entrenador, y ha sido la clave".
El entrenador del Valeriano no escondió, pese a la clasificación, que el partido jugado ayer en Vilsbiburg, "ha sido muy atípico para nosotros y probablemente el peor que hemos jugado hasta ahora en la temporada porque hemos sufrido en recepción, el saque no ha sido estable como en Menorca y ellas, en bloqueo, nos han hecho daño". Negó Rodríguez que el equipo se dejara ir para jugárselo todo en el set de oro visto que el resultado, si perdía, no servía para nada. "No, en absoluto, hemos venido a competir pero no lo teníamos en nuestra mano, y el set de oro era nuestra última bala que hemos sabido aprovechar".
El Valeriano continuará, por tanto, en dos competiciones, la Superliga y la CEV Cup. Chema Rodríguez, en este sentido, valoró muy positivamente, la llegada del nuevo fichaje, "porque nos hace mucha falta para poder afrontar estos dos campeonatos y seguir compitiendo ya que el desgaste es grande".
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