Cara y cruz. La alegría del segundo título de Liga puede coincidir con la renuncia a la Superliga - Archivo

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Lo que parecía un rumor derivó ayer en grito aterrador. El Club Volei Ciutadella, flamante bicampeón de la Superliga femenina de volei, anunció que renuncia a la categoría porque el Govern Balear no le paga los 146.000 euros que le adeuda desde la temporada 2010-2011.

La decisión llega después de que los bancos hayan denegado el convenio firmado con el Ejecutivo para dar liquidez al club que preside Katy Moll lo que obliga a la directiva a avalar como ya hiciera la temporada pasada para poder afrontar la deuda que mantiene con la Federación Española, así como los requisitos mínimos para competir.

"Todos los directivos estamos comprometidos económicamente y estamos agotados de la pasividad del Govern. O cambia esa actitud o renunciamos a la Superliga", dijo la presidenta. Y habla en serio.

Si algo ha caracterizado al CV Ciutadella en su historia ha sido la capacidad de mantener los pies en el suelo y no gastar nunca más de lo que disponen.

En el comunicado emitido ayer denuncian que "el club no tiene ninguna posibilidad de cumplir con los requisitos inmediatos que se le exige para inscribirse en Superliga: el pago de la deuda con la Federación Española correspondiente a la temporada 2011-2012, que asciende a 24.536,40 euros, la obtención de un nuevo aval bancario de 15.000 euros para la próxima temporada, cuando no se ha podido retirar el anterior de 30.000 euros que es el que garantiza la deuda del primer punto, y el pago de la cuota de inscripción para el curso 2012-2013 por un importe de 7.000 euros" que se debe hacer efectivo antes día 10 de julio, según explicaron ayer desde la Federación.

Tres directivos firmaron un aval de 30.000 euros cuyo plazo expira hoy y la Española ha amenazado al club con ejecutarlo para cobrar la deuda de 24.536,40 euros aunque en los últimos días la cúpula firmó otro por el importe exacto que se adeuda y que expira dentro de un año, ganando algo más de tiempo. El problema, lamenta Moll, es que para inscribirse en la Superliga, y ante la falta de liquidez, la Directiva tendría que firmar otro aval de 15.000 euros, condición sine qua non, más los 7.000 euros que cuesta inscribirse.

En el comunicado emitido ayer denuncian que "la solvencia que sufre el club viene provocada directamente por la gestión económica y administrativa de la Fundació Illesport y de la Direcció General d'Esports, incapaces ambos de pagar lo que queda pendiente de la temporada 2010-2011, 86.000 euros aproximadamente, además de la deuda actual de unos 60.000 euros". A eso se suma que el club no ha conseguido que ninguna entidad bancaria asuma la deuda "lo que hace imposible financiar y solucionar el problema obteniendo liquidez necesaria e imprescindible para llevar a cabo cualquier proyecto".

Desde el CV Ciutadella lamentan tener que tomar esta medida, y más tras sus exitosos últimos años, y la justifican "por la ineficacia de los que gobiernan y no por la gestión del club". La entidad bermellona espera que el Govern Balear reaccione y ofrezca garantías de que va a pagar los 146.000 que le adeuda.

"El problema es el dinero adeudado"

El entrenador del CV Ciutadella, Chema Rodríguez lamentó ayer, desde Albacete, la noticia emitida por el club. "El mayor problema es la falta del ingreso del dinero que se le adeuda no sólo de esta temporada sino desde la 2010-2011", valora el entrenador. Rodríguez matiza que "lo que más me fastidia es que este dinero ni es para tapar un agujero ni fruto de una mala gestión, es una cantidad que se debe".

Para Rodríguez, "no solo hemos cumplido en la pista, también lo han hecho fuera los patrocinadores como Valeriano Allés, o la Junta Directiva que ha puesto dinero de su bolsillo, todos hemos afrontado una situación muy difícil". "Es muy triste que no haya recursos para pasar el día a día", dice el técnico quien admite que "el club puede estar orgulloso porque no se ha gastado ni un céntimo más de lo presupuestado".

"El deporte no les interesa suficiente"

La presidenta del CV Ciutadella, Katy Moll, asegura que "ha quedado claro que el deporte ha pasado a un segundo plano y no les interesa lo suficiente", apuntando al Govern indirectamente, principal deudor de las bermellonas. "Sabemos que hay problemas en la sociedad muy importantes pero creo que no tienen en cuenta los méritos que hemos ido acumulando", lamenta Moll.

La presidenta añade que "lo curioso es que tenemos el apoyo, dicen que contemos con ellos pero no tenemos el dinero, como si te dicen que te quieren pero no lo demuestran". Otro punto que enfada a Moll es que "los bancos no aceptan los convenios firmados con el Govern , no nos dan dinero y el Ejecutivo tampoco quiere adelantarnos 25.000 euros del convenio firmado". "Todos los directivos estamos agotados".

"El Ciutadella, una entidad ejemplar"

El presidente del Consell Insular, Santiago Tadeo, explicó que "coincidimos hace unos días con la presidenta y con Juanjo Pons y somos conscientes de la necesidad que tienen" . Admite que "todas las instituciones públicas debemos priorizar para evitar que desaparezcan tanto los clubes deportivos como las empresas privadas".

Tadeo matiza que "el caso del CV Ciutadella es el de una entidad ejemplar, un club modélico, y ahora tiene una prioridad que se debe solventar. Hacemos gestiones para intentar que se desbloqueen esos compromisos".

Por su parte, el conseller d'Esports, Juanjo Pons, apunta que "el Ciutadella es un ejemplo no solo deportivamente sino también en la gestión que hace y sorprende que tengan que pasar por esta situación, trabajamos para que salga de esta situación".