Como la noche y el día. Los dos primeros rounds de la gran final del play off de la Superliga de volei han resultado ser tan distintos que pocos son los puntos en los que coinciden. Al sorprendente e inesperado 3-0 favorable al Valeriano Allès con el que se abrió la serie le siguió una derrota bermellona (2-3) que pudo decantarse para uno u otro bando. La ausencia de Kylie Atherstone en el primer partido y la gran rotación de Venancio Costa, técnico del Murcia, en el segundo, son algunos de los aspectos que condicionaron un resultado (1-1) que obliga a las ciutadellencas a ganar, como mínimo un partido, en el pabellón Príncipes de Asturias.
El ilusionante 3-0 que abrió la final resultó una arma de doble filo para el Valeriano Allès. En la machada bermellona, el CAV Murcia acusó la falta de acierto en la recepción, lo que debilitó sus opciones en ataque a la hora de crear juego. Otro elemento que condicionó el primer partido de la final fue la irrupción de Sabrina Duarte en la alineación de Chema Rodríguez, ante la baja de Atherstone. La apuesta por la jugadora brasileña permitió al Valeriano jugar con tres centrales, un auténtico muro para el ataque murciano.
Un dato que se ha repetido en los dos partidos ha sido la aportación ofensiva de Diana Sánchez, que corrobora la total recuperación de la jugadora internacional que acabó el fin de semana en Ciutadella con 21 puntos (10+11), cuando su aportación suele tener más peso en las ayudas a Esther López en la recepción.
más ambicioso el murcia
Tras el primer 'jub' del Valeriano Allès, Venancio Costa exigió a sus jugadoras una mayor intensidad para afrontar el duelo a penas 24 horas después. Reaccionaron sus pupilas con una exhibición de garra y coraje que quedó patente desde el primer balón con una forma agresiva de celebrar los puntos. Por contra, el 3-0 inicial pareció relajar por momentos a las bermellonas que no mostraron su auténtico nivel de concentración y de ambición, algo que denunció Chema Rodríguez al final del partido.
En el segundo enfrentamiento las murcianas mejoraron sensiblemente su porcentaje de recepción, lo que permitió a su estrella, Visser Ingrid, entrar más en el juego de ataque (10 puntos el primer día, 18 el segundo). Además, Costa apostó por rotar constantemente a sus jugadoras hasta dar con la combinación ideal. Todas las jugadoras gozaron de presencia en pista e incluso cinco de ellas sumaron doce o más puntos.
El Valeriano Allès, de cara al partido de mañana, debe recuperar su carácter ganador, el que ha exhibido a lo largo de la fase regular, y demostrar que tiene hambre de títulos, que no basta con haber llegado hasta la final de la Superliga. En el equipo sobrevuela la convicción de que no regresarán de Murcia solos. Que en la vuelta a Ciutadella el título de supercampeonas les acompañará haciendo justicia a la labor de todo el año.
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