"Vale, vale… ¡Valeriano!". Con este grito de guerra arrancó oficialmente la pretemporada del Volei Ciutadella 2011/2012. Fue mucho más que un simple chillido. Fue el carpetazo a un verano largo, demasiado largo, en todos los aspectos.
Desde la espantada de Diana Sánchez a la incógnita en las subvenciones, pasando por fichajes y desfichajes. Más de cuatro meses después de la consecución del título de Superliga, el volei de élite regresó a Ciutadella. Una primera jornada de trabajo en la que no se abusó demasiado y en el que la tónica fueron las presentaciones y las primeras tomas de contacto.
El primer día de entrenamiento estuvo partido. Por la mañana el grupo de Chema Rodríguez tuvo la primera presentación, en la que hubo una charla del técnico y del director deportivo, Bep Llorens, además de una serie de tests para ver en qué estado físico llegan las jugadoras.
La tarde sirvió para una sesión de fotografías para la prensa y para que las jugadoras compartieran sus primeras impresiones. Por ejemplo, Esther López tomará el testigo a Tico González como capitana . "Estoy muy ilusionada y con muchas ganas, como todo el equipo", admitió la donostiarra, que ante los problemas del club apuesta por "que todas hagamos un esfuerzo extra y aportemos un poco más".
Mientras las jugadoras pasaban una por una por el objetivo de Paco Sturla, fotógrafo del diario 'Menorca', Chema Rodríguez contemplaba desde la distancia la escena con semblante serio aunque con alguna sonrisa que se le escapaba por los nervios de sus jugadoras. Las 'veteranas' como Alba Cardona y Janine Sandell se abrazaban, recordando quizás que en ese mismo lugar, el pasado 15 de mayo se alzaban como supercampeonas de España. Sin duda, el escenario rememoró a más de una muchas y buenas sensaciones.
Uno de los 'fichajes' para este curso es Hélia González, que, según el club, todavía le falta un mes para estar en óptimas condiciones para competir, aunque ya entrena. Ayer se la vio animada, integrada, y siempre cerca del balón. Sabe que el club espera mucho de ella y que será su año, si su rodilla deja atrás todos los fantasmas del pasado.
En la "vuelta al cole", como bromeó el técnico manchego, no estuvieron todas. Faltó Ana Correa, que se unirá al grupo el domingo tras su participación en el Campeonato de Europa con España. La que sí que acudió fue la joven Roser Olives, juvenil de primer año, que el club ha decidido que entrene con el primer equipo toda la temporada, mientras juega con el Primera Balear.
"Estoy con muchas ganas de empezar a trabajar, vengo a un equipo que ha sido campeón de liga y que querrá mantener el título y ya se sabe, ganar el torneo es complicado pero todavía es más difícil repetirlo", explicó Liz Hintemann, una de las nuevas jugadoras.
La primera sesión se cerró sin complicaciones. Hoy ya empieza la carga de trabajo físico. Será el primer entrenamiento serio de un campeón que vuelve al trabajo cuatro meses después.
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