Jornada de transistores, de internet, en el Pavelló Municipal de Ciutadella esta tarde. Con un ojo puesto en lo que ocurra en Murillo, el Valeriano Allès buscará asegurar la victoria ante el Vall d'Hebrón y mantener sus aspiraciones de disputar las semifinales. Las chicas de Bep Llorens pueden certificar una excepcional segunda vuelta, coronada con el subcampeonato de la Copa de la Reina, si hoy someten al cuadro catalán y se confirma la lógica derrota del IBSA Gran Canaria en la pista del líder Murillo, combinación que debe darse para que las menorquinas se clasifiquen para los Play off.
A escasas horas de esta decisiva cita, Llorens ve a las suyas «con ganas de que llegue el momento y saber si nuestro trabajo tendrá su recompensa. Hemos intentado esta semana, después de la derrota en Haro, estar más unidas que nunca y hacer piña como grupo», manifestaba ayer el técnico, consciente que hoy el aspecto anímico y moral se antoja determinante. Para Llorens, el rival es un equipo «fuerte en la red, con una gran atacante, Arranz, como referencia. Es un equipo con carácter y que juega a tope siempre. Será un partido duro», no dudando que las de Cardozo aterrizan en la Isla para ganar y redondear su gran temporada. «Hay que seguir en la línea de los últimos partidos en casa. Buen saque y buenos porcentajes de acierto en ataque», avanza, como claves del éxito.
El 'siete', sin decidir
Con la intención de recuperar la mejor forma física en sus jugadoras, en este comienzo de semana el equipo ha trabajado mucho. «Eso nos ha provocado alguna sobrecarga pero que gestionaremos bien para que todas estén disponibles. No tengo decidido el equipo titular pero tengo a todas disponibles, incluso a Sheila D'Amaro, recuperada de la pierna», acababa el preparador, que deberá decidir entre la hispano-brasileña o la capitana Ester Marquès.
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