La colocadora internacional del Avarca, Danira Costa, el pasado sábado en El Ferial de La Rioja. | Ricardo Donézar

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Juega esta tarde el Avarca de Menorca en el Pavelló y ante el siempre incómodo Alcobendas un partido de estos que no se pueden perder. Por la necesidad de volver a ganar tras dos derrotas, por ser un rival directo y por la obligatoriedad de ir sumando si se quiere estar en la Copa de la Reina. Y este comprometido partido le llega al Avarca tras la semana más complicada en el aspecto físico, con mucha gente tocada a la que Bep Llorens ha tenido que ir administrando.

Ana B. Pérez con problemas en el hombro, Raquel Brun en una rodilla, Bea Vázquez en los gemelos y Rocío Gómez -infiltrada por dolores en el pie- el panorama con el que cuenta el técnico, que pese a ello espera que «no provoque la baja de nadie. Pero hemos tenido muchos problemas físicos para entrenar con normalidad», lamentaba Llorens. Y en una preparación previa del partido en la que han realizado «mucho auto análisis, donde hemos hecho vídeo todos los días para trabajar errores nuestros y estudio del rival», admite. Principalmente, han hecho hincapié en la «intensidad defensiva, que ha sido un aspecto fuerte durante estos primeros partidos y que solo en Haro no fue así y se notó».

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