Bea. Los 10 puntos de la ‘avarquera’ fueron determinantes para que Menorca volviera a ganar en Superliga. Abajo, Esteban en una recepción | CVB Barça

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Avarca de Menorca 3

A pesar de que únicamente se jugaba una mejor clasificación, el Avarca se rehizo de un mal inicio para lograr la victoria 1-3. Los compases iniciales mostraron a un Barça más entonado desde el saque, lo que impedía los ataques claros del Menorca, facilitando así la labor local (7-4). Las locales seguían mostrando su potencial en bloqueo, para mandar en el electrónico, lo que llevó a Llorens a solicitar el primer tiempo muerto. Pese a ello las menorquinas seguían viendo lastrado su juego por una recepción deficiente, mientras que las locales seguían por delante gracias a una mejor actitud defensiva. Pese a que el Avarca igualó el marcador gracias a los errores locales, en la recta final la mala recepción volvió a condenar a Avarca, cediendo 25-21.

El Avarca salió más enchufado, haciendo daño al Barça 6-1. Pese al mal inicio, las locales equilibraron con un juego compensado 7-7, ya que el Avarca fiaba casi todo el acierto en Raquel Brun. Fue esa diferencia en la aportación de varias de sus jugadoras lo que llevó al Barça a situarse de nuevo por delante, 14-10, llevando a LLorens a hacer uso de sus dos tiempos muertos en apenas minutos. Avarca logró recortar aprovechando la presencia de Brun en ataque 18-18. En la recta final el parcial volvió a ser frenético pero fueron las visitantes la que templaron los nervios 23-25.

La igualdad siguió en el tercer set, 9-9, predominando los errores sobre los aciertos, conscientes de la importancia de no dar margen. Fueron las visitantes las primeras en despegarse, 11-14, pero los errores en ataque hicieron posible que las azulgranas se pusieran por delante, 17-16. En la recta final fueron las menorquinas las que jugaron mejor para apuntarse la manga por 20-25.

Ambos conjuntos bajaron sus prestaciones al inicio del cuarto, debido en parte al cansancio acumulado. En esta ocasión fue el Barça en primero el lograr una mínima renta, 14-11. Una diferencia que las menorquinas consiguieron recuperar de nuevo, más por fallos rivales que por mejora en su juego. Tras llegarse al empate a 17, ninguno de los dos equipos se distanció a más de dos puntos, llegándose a la parte final del cuarto set con máxima igualdad, 23 iguales. La mayor experiencia del Menorca y una determinante Raquel Brun fueron la clave para que el Menorca lograr la victoria por 23 25 y llevarse el encuentro por 1-3.