El Avarca, que se deshizo por la vía rápida del VP Madrid (3-0) el día 19 de noviembre, se jugará una plaza para la Copa de la Reina en la última jornada; | Josep Bagur Gomila

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De combinaciones matemáticas y carambolas deportivas. Parece lo mismo pero no lo es. La última jornada de la primera vuelta de la Superliga Femenina, que se celebra este sábado en horario unificado (19 horas), decidirá los inquilinos de las dos últimas plazas que dan acceso a jugar la próxima edición de la Copa de la Reina 2017.

Los implicados: Aguere Tenerife (17 puntos), Alcobendas (15), Avarca de Menorca (15) y CVB Barça (14), aunque este último sin incidencia directa en los intereses del equipo de Ciutadella. Y en esta pugna sobre la primera línea de meta de la temporada, los cálculos matemáticos no se corresponden con los valores deportivos de los conjuntos protagonistas y sus adversarios. No todas las combinaciones posibles son probables.

De entrada, el Avarca necesita sí o sí puntuar y primordialmente obtener un triunfo de valor tres puntos (3-0 o 3-1) frente al Fígaro Peluqueros Haris de Tenerife. Paralelamente, el equipo del Poliesportiu Municipal de poniente precisaría que Alcobendas y/o Aguere obtengan un resultado inferior al del 'siete' menorquín. Ambos juegan a domicilio, en las canchas del Sant Cugat e IBSA Gran Canaria, respectivamente.

La dificultad deportiva que supone derrotar al segundo clasificado es evidente. El rival tinerfeño solo ha perdido con el líder Naturhouse Ciudad de Logroño (3-0) y ha cedido apenas ocho sets en las nueve jornadas. En el caso de que el Avarca logre una victoria de valor dos puntos (3-2) o una derrota que le permita sumar un punto (2-3), necesitaría imperiosamente que el Alcobendas obtuviera un resultado peor, puesto que el empate a puntos favorece al club madrileño por sumar un mayor número de victorias.

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