«Menorca». Si el año pasado fue el turno de «Isla bonita», 2016 seguramente será el de esta producción canadiense, rodada en la Isla, y que tienen previsto estrenar esta temporada. En la imagen, la protagonista, Tammy Gills, en Favàritx | FARPOINT FILMS

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El cine sigue recuperando el terreno perdido en la Isla. Lejos todavía de acercarse a las cifras récord de 2012, cuando se rozaron los 200.000 espectadores, las empresas que se dedican a la exhibición en Menorca continúan con la tendencia ascendente. Tanto desde Ocimax en Maó como desde las salas del Canal Salat en Ciutadella confirman que 2015 «ha sido un buen año». Aunque si están contentos con el creciente gancho con el público, no lo están tanto con la rentabilidad de los negocios. Y es que, al igual que a nivel nacional, desde Menorca se repite también como un mantra «la losa» que supone el IVA al 21 por ciento.

Entre Maó y Ciutadella sumaron el año pasado 163.800 entradas vendidas, 14.800 más que en 2015, lo que supone un crecimiento aproximado del 9 por ciento, un punto por encima de la media nacional. ¿Los motivos? Los exhibidores los tienen bien claros. Joan Salas, de Salpón, la empresa que explota Ocimax, apunta que ha sido «un año excepcional» en lo que se refiere a películas de éxito, en torno a una decena de hits, a los que hay que sumar estrenos potentes en el tramo final del año, como «La Guerra de las Galaxias» y «Palmeras en la nieve», que han acabado de rematar la temporada.

En la zona de poniente, Jaume Mayans comparte el argumento y añade que otro factor a favor, al menos en su caso, ha sido la buena temporada turística. «El aumento del turismo nacional se ha vuelto a notar en las taquillas de verano», sostiene el empresario. Y es que en su caso, las dos salas de proyección lograron batir el récord de espectadores de toda su historia, superando en 1.800 espectadores los 57.000 que pasaron por el cine el año que comenzaron a desarrollar la actividad, 2012. En el caso de Ciutadella, el aumento de espectadores respecto a 2014 ha sido más notable, situándose en un 13,5 por ciento.

Sin embargo, en Maó, con cinco salas y una mayor área de negocio, por la proximidad de localidades como Alaior, Es Castell y Sant Lluís, la tendencia al alza no es tan destacada. Y es que en este caso el crecimiento en el número de espectadores ha sido del 6,6 por ciento, hasta alcanzar las 105.000 entradas vendidas.

En cuanto a los precios de las entradas, destacar que en 2015 se ha optado por mantener prácticamente las tarifas. Como dato, cabe señalar que, por ejemplo, ver la «Guerra de las Galaxias» costó de media cuatro euros más en Madrid que en una sala de Ciutadella.