Scarpa, en segundo plano, con el proyecto Wanderlust

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El colectivo de músicos del Archipiélago viene trabajando desde hace unos meses con el propósito de conseguir para el sector un convenio colectivo. Un objetivo largo y complicado pero que en los últimos días ha dado un paso adelante después de que el Govern balear se haya comprometido a respaldar a los artistas. El objetivo que pretenden es paliar de alguna forma la precariedad que vive el sector, regular la contratación y conseguir cachés dignos.

Un acuerdo que es fruto del encuentro mantenido hace unos días entre ProMúsics Mallorca y la Associació de Músics d’Eivissa, representando también a las entidades de músicos de Menorca y Formentera, con la consellera de Presidencia del Govern, Mercedes Garrido, la secretaria general de la Conselleria de Fondos Europeos, Universidad y Cultura, María Gracia González y la directora general de Cultura, Catalina Solivellas.

«Lo positivo de la reunión es que al ver nuestra precaria situación laboral, el Govern se ha comprometido a respaldarnos para mediar entre los artistas, a través de sindicatos y patronal, y así conseguir el primer convenio colectivo de músicos en Balears», celebran en una nota de prensa.

En el encuentro se trataron varias de las cuestiones en las que las asociaciones vienen trabajando desde hace dos años. Si bien el apoyo de cara al convenio supone un avance, durante la reunión se les comunicó la imposibilidad de poder crear una ayuda específica para el colectivo «al no encontrar un encaje jurídico de nuestra particular forma de contratación, la mayoría de veces en regímenes laborales que no nos corresponden», explican los músicos.

Reconocen que ha habido ayudas para quienes trabajan por cuenta ajena con la prestación de paro extraordinario y también para los autónomos. «El problema es que los músicos que no han sido dados de alta en el régimen de artista no han podido acogerse a ninguna ayuda, teniendo sólo la posibilidad del ingreso mínimo vital», alertan.

En ese sentido, sostienen que el fracaso de no conseguir una ayuda «pone de manifiesto la necesidad de que cada uno de nosotros exija a la hora de trabajar ser contratados en el régimen laboral que nos corresponde (el de artista) para tener garantizados nuestros derechos», concluyen.