Jordi Orfila Mascaró, a la derecha de la imagen.

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Jordi Orfila Mascaró atesoraba la tradición y el compromiso de Menorca con el glosat y el canto. Durante años demostró su constante implicación con la cultura popular menorquina como sonador de porgueres y guitarrista. Ha fallecido en Alaior, su población natal, a los 95 años.

Nació el 2 de septiembre de 1928 en la calle de Ses Nuvies, y fue el cuarto de ocho hermanos. Empezó a trabajar a los doce años como missatge en varias fincas agrícolas: Torresolí Nou, Biniac, L’Argentina, Biniac Vell, s’Estància de Binixems y Santa Eulàlia de Baix.

La afición a la música, concretamente la guitarra y el canto, empezó a edad muy temprana, durante su infancia y adolescencia. Después aprendió de manera autodidacta y llegó a formar parte de la Banda de Música de Alaior, con el bombo y los platillos.

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En s’Estància de Binixems conoció a Maria Bagur Seguí, con la que contrajo matrimonio. Junto con su esposa participó en varios grupos folklóricos de Alaior, ella bailando y el, tocando el laúd.

Fueron padres de una hija, Merche, que ejerció como directora de la Escuela de Música de Alaior. En abril de 2016 fue objeto de un emotivo homenaje, promovido por el Ayuntamiento y los glosadors de Alaior encabezados por Toni Rotger y Jaume Llambías, que se celebró en la Sala de Cultura de Sant Diego.

Actuaron la Coral Canticus, la Rondalla d’Alaior y los Glosadors d’Alaior. Los organizadores destacaron que Jordi Orfila era «un hombre sencillo, honrado, buena persona y amante indiscutible de la tradición cultural menorquina».

El Centre d’Estudis Locals d’Alaior, que se adhirió a este homenaje, manifestó que era un reconocimiento a la «labor silenciosa de Jordi Orfila; el, con su guitarra, ha participado en numerosos actos culturales, ayudando a alimentar nuestra cultura popular, con una aportación constante a la música».