La iniciativa de Vox pretende evitar las consecuencias de pérdida de representación por la división de la oferta política, como se comprobó el 28-A | Javier Coll

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Vox ha hecho un llamamiento al PP y a Ciudadanos para diseñar una estrategia electoral conjunta ante los comicios locales del domingo 26. Propone para ello tres ejes básicos sobre los que articular los mismos mensajes: infraestructuras, ordenación del territorio y economía.

Las consecuencias, con merma de representación en las generales del domingo por acudir con candidaturas separadas, son una de las razones en las que apoya la iniciativa. Otra es la valoración que realiza el partido que lidera en Menorca Antoni Camps de la negativa gestión que ha realizado la izquierda durante el actual mandato, «es imprescindible, por el bien de Menorca, evitar que vuelvan a gobenar», afirma.

Sin embargo, ni PP ni sobre todo Ciudadanos están por la labor. Ambos se desmarcaron este viernes de valorar siquiera la posibilidad de un encuentro para discutir la iniciativa.

«No hemos recibido ninguna propuesta que merezca ser tenida en cuenta», se despachó la presidenta popular, Misericordia Sugrañes. «La puesta en escena de Vox que hemos conocido hoy no pretende más que ganar notoriedad y perjudicar al PP, dividiendo el voto del centroderecha, lo que propicia gobiernos de izquierda, como se ha visto en España», asegura.

Le incomoda la idea y reclama calma «ante las propuestas que partidos sin experiencia han venido lanzando y se lanzarán en los próximos días para lograr un titular», valora Sugrañes. La líder popular apela a la hegemonía de su propia organización, la que más presencia tendrá en los colegios electorales y una de las que más experiencia de gestión acumula en los últimos mandatos.

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«Nada de qué hablar»

La reacción de Ciudadanos va en la misma línea, con más peso argumental. «Eso es cosa de Vox, nosotros no hacemos frente común con nadie», argumenta el coordinador, Jesús Méndez. «Además somos un partido centrista, eso de las tres derechas es un invento de Podemos», añade.

Respecto al documento enviado por el nuevo partido, anuncia que le contestará en negativo con una carta amable, «pero no nos acercamos ni un paso y hasta después de las elecciones no hablaremos con nadie», señala un Méndez optimista respecto a las sensaciones con las que C’s afronta la cita del domingo 26.

«Estratégicamente no tenemos nada de qué hablar, no entramos en la dialéctica de la confrontación izquierda-derecha, nuestra espacio es el centro y el voto útil ahora mismo es el nuestro», dice.

Vox apela a la responsabilidad en su iniciativa, porque cuatro años más de gobierno de la izquierda «puede ser letal para la convivencia y para el desarrollo armónico de nuestra sociedad». Por ello, para que «Menorca recuper el ritmo económico y el dinamismo perdido» pretendía atraer a las dos fuerzas citadas con un mensaje pactado sobre las infraestructuras portuarias, viarias, turísticas e hidráculicas. En segundo lugar, con un nuevo PTI «abierto, moderno y expansivo» y, por último, lo más novedoso, con un Régimen Especial para Menorca (REM) para compensar la doble insularidad.