Menorca cierra 2008 con 1.727 parados más que hace un año

El informe de coyuntura presentado ayer indica que en el conjunto de Balears el número de desocupados ha aumentado un 46,6 por ciento en el mismo período. El mes pasado el total de desempleados en las Islas ascendió a 73.298 personas.
El paro aumenta en todos los colectivos y sectores productivos, aunque lo hace de manera especial entre la población masculina, los extranjeros no comunitarios, en la construcción y en la industria y entre quienes no tenían una ocupación anterior.
En relación con noviembre el número de parados en Menorca aumentó un 3,8 por ciento, mientras que en Eivissa lo hizo en un 3,7 por ciento y en Mallorca, en un 4,7 por ciento.

Contratos
La Conselleria detecta una caída generalizada de la contratación, de la que se salva la isla de Formentera, donde el número de contratos firmados en diciembre creció un 45,8 por ciento. En Menorca desciende un 12,9 por ciento con respecto a diciembre de 2007; en relación con el mes anterior, la contratación en la Isla baja un 30,5 por ciento.

Paralelamente se observa una caída de los contratos temporales, mientras que la contratación indefinida constituye un 21 por ciento del total en Menorca. En el conjunto de la Comunidad Autónoma se contabilizaron en diciembre 16.738 nuevos contratos; son un 23 por ciento menos que en noviembre y un 18 por ciento menos que hace un año.

La consellera de Trabajo y Formación, Joana Barceló, reconoce que las cifras "son duras" pero vaticina una recuperación del mercado laboral de las Islas a partir de abril, coincidiendo con el inicio de la temporada turística y la ejecución de las inversiones en obra pública contempladas en las medidas "anticrisis" de la Administración. Joana Barceló subrayó ayer como positivo el hecho de que Balears no haya alcanzado los 80.000 parados que se pronosticaron para finales de año. La titular de Trabajo del Govern afirma que los dos próximos meses engrosarán aún las listas del paro, aunque ya no serán incrementos sustanciales.

Joana Barceló apostó por transmitir a la población "un mensaje de confianza ligado al consumo", dado que todas las previsiones apuntan a que Balears mantendrá un crecimiento económico positivo en 2009, en contraste con otras zonas de España donde, según los pronósticos, se entrará en recesión.