INDUSTRIa. Ha sido el sector con una mayor bajada en el número de contratos, un 24,6 por ciento

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LL.A.C. Maó
El año pasado se redujo un 14 por ciento el número de contratos de trabajo formalizados en Menorca. Un descenso superior a la media balear (13,3 por ciento), pero que se complementa con otro dato: cada vez es mayor la proporción de contrataciones indefinidas realizadas en la Isla. En concreto, de los contratos formalizados el pasado año en Menorca, un 9,2 por ciento fueron de carácter indefinido, cuando en 2007 ese porcentaje era del 8,2.

Por pasos. El pasado año se rubricaron en Menorca 28.708 nuevos contratos de trabajo, 4.600 menos que en el 2007. Un descenso a la par del registrado en Mallorca, pero superior al de Eivissa y al de Formentera (única isla esta última donde han aumentado los contratos). Por municipios, Ferreries lidera este descenso, con una bajada del 18,8 por ciento en los acuerdos laborales. Maó y Alaior, los dos municipios que más vieron engrosadas sus listas del paro el pasado año, también registran importantes bajadas en el número de contrataciones, superando la media menorquina. Es Castell y Sant Lluís se sitúan en el otro extremo, y sufren la bajada menos dura de las contabilizadas en Menorca.

ANÁLISIS POR SECTORES
Por sectores, donde más se ha notado la bajada de contrataciones es en la industria y en la construcción. En el primer caso, se han registrado un 24,6 por ciento menos de contratos, mientras que en la construcción el descenso es del 24,5. En cambio, el sector servicios -del que muchos especialistas dicen que es el que aguanta el tirón- registra una caída menos dura, con un 10,6 por ciento de reducción de contrataciones.

En este orden de cosas, tres apuntes. Es Castell (2,2 por ciento) y sobre todo Ferreries (35,5 por ciento) han aumentado las contrataciones en el sector industrial. También registra un incremento, aunque muy ligero (0,7 por ciento) el número de acuerdos laborales del sector servicios en Sant Lluís. Y por último, el sector agrícola confirma que en toda estadística hay una excepción: el número de contratos laborales firmados en el campo menorquín creció en 2008 un 29 por ciento.

MÁS INDEFINIDOS
El otro análisis destacado de los datos de contrataciones apunta hacia la temporalidad en el empleo, que en Menorca se reduce muy lentamente pero sin pausa. Así, de los contratos firmados el pasado año un 9,2 por ciento fueron indefinidos, cuando en 2007 este porcentaje era del 8,2 por ciento, y en el 2006 del 6,2. Al número de contratos indefinidos formalizados hay que añadir los que han pasado de ser temporales a fijos, que en Menorca fueron un 5,2 por ciento del total el año pasado. Así, este baile de cifras sitúa a Menorca como la segunda isla con un empleo más estable, ya que el 14,4 por ciento del total de los acuerdos firmados entre empresario y trabajador son de duración indefinida, un porcentaje solamente superado por Formentera (15,2), y casi un punto por encima de la media balear.

En este sentido, Menorca lideraba en 2007 la estabilidad laboral, con 0,3 puntos por encima de Formentera, superando en dos décimas la media balear.

Ferreries y mujeres, estables
Es ya una tendencia habitual en los últimos años, que se ha confirmado en el 2008: los contratos de las mujeres en Menorca son más estables que los de los hombres. Así lo confirman las cifras. El 10,1 por cien de los acuerdos laborales firmados por mujeres son de carácter indefinido, mientras que entre los hombres este índice es del 8,3 por cien. 1,8 puntos de diferencia, la mayor de los últimos años, ya que en 2006 el margen entre hombres y mujeres era de un punto.

Por municipios, es Ferreries el que registra un mayor porcentaje de contratos indefinidos, un 14,2 por ciento del total. En el otro extremo, Es Castell. El municipio en que menos han descendido las contrataciones es, en cambio, aquel en el que los acuerdos laborales son menos estables, ya que solamente un seis por ciento de los que se firman tiene duración indefinida. Por contra, casi nueve de cada diez tienen un plazo limitado. En Maó también son pocos los contratos indefinidos (6,5 por ciento), mientras Ciutadella supera la media menorquina (10,7).