El alcalde de Maó, Vicenç Tur, decretó y firmó ayer la medida cautelar de suspensión de funciones del interventor, que se mantendrá hasta que se produzca la aprobación definitiva de la resolución por parte del Consell de Govern de la Comunidad Autónoma, ya que el nombramiento del interventor corresponde a la Conselleria de Interior a instancias del Consistorio.
La medida adoptada por la Alcaldía fue hecha pública ayer al mediodía por la teniente de alcalde de Servicios Generales, Àngels Andreu, mediante la lectura de un comunicado "extraordinario y urgente" ante los medios informativos. La concejala socialista no especificó los hechos que motivaron la incoación del expediente, en julio de 2008, aunque sí señaló que entre enero y abril del año pasado el Consistorio detectó "problemas de tramitación administrativa y expedientes bloqueados".
El equipo de gobierno decidió abrir el expediente disciplinario, cuyo instructor fue nombrado por la Dirección General de Función Pública de la Conselleria de Interior. La instrucción del expediente concluyó en diciembre de 2008 y este mes el Ayuntamiento ha recibido la propuesta de resolución del mismo, en la que se consideran "probados" hechos que constituyen "una falta disciplinaria muy grave de incumplimiento de las funciones esenciales y encargadas, y una falta notoria de rendimiento". Según el comunicado, el interventor "ha conocido en todo momento el desarrollo del procedimiento" y ha tenido opción a presentar alegaciones. El caso se expuso ayer mismo en la comisión informativa de Servicios Generales y en la junta de portavoces al resto de los grupos políticos del Ayuntamiento. La propuesta de resolución del expediente se debatirá en un pleno extraordinario este lunes.
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