Reuniones. FITUR es, sin duda, el gran foro de debate y conocimiento de la realidad turística insular
O.R.P. Madrid
Ayer se cubrió la primera etapa de FITUR; una carrera de fondo que debe culminar en una recuperación del turismo insular. Por el momento, la preocupación por los mensajes pesimistas y los nervios inundan los pasillos. Menorca no es el único destino con problemas. Las reuniones se suceden y lo único en claro que se puede sacar a la luz es que la colaboración de todos debe ser el camino a seguir. Mientras, el Consell amplía recursos promocionales presentando un nuevo anuncio televisivo enfocado a mejorar la notoriedad de la Isla en Alemania, el Reino Unido y España.
La jornada comenzó complicada; tal y como se preveía. Las noticias no son buenas y las
reuniones con los touroperadores así lo reafirmaron. Toca trabajar. Este es el mensaje de todos los presentes; aunque algunos vayan en direcciones opuestas. Menorca necesita confianza y esto es precisamente lo que reclaman los agentes emisores. Eso y rentabilidad. Si esto pasa por rebajar las tarifas debe ser decisión de los empresarios. Sin embargo, los touroperadores alertan que este año las vacaciones cuestan, a una familia británica, un 40 por ciento más que el año pasado por la diferencia de valor entre la libra y el Euro. "La ley de la oferta y la demanda dice que a cuanto menor es el precio mayor es la demanda", recuerda al respecto el conseller de Turismo, Lázaro Criado.
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