Precisamente, los residentes de los dos cuarteles llevan años pidiendo una puesta a punto de ambos edificios. En 2005, las familias que viven en el pabellón de Maó, ubicado en la carretera a Sant Lluís, denunciaban la insalubridad de las conducciones de agua, las deficiencias en el mantenimiento del edificio y la existencia de un sistema de circuito cerrado de cámaras obsoleto para la seguridad del recinto.
Asimismo, ese mismo año, las familias residentes en el cuartel de Ciutadella se sumaron a las peticiones para mejorar el complejo ubicado en Dalt sa Quintana. Los afectados denunciaban que el recinto de Ciutadella, construido en los años 70, sólo se había pintado una vez en 25 años, y que presentaba también importantes deficiencias para poder residir en condiciones.
Inversión
El director insular de la Administración General del Estado, Javier Tejero, informa que el Ministerio del Interior reservó en los presupuestos del Estado de este año una partida de casi un millón de euros para acometer la reforma de ambos cuarteles. Se destinarán casi 500.000 euros en cada complejo para dejar los edificios en condiciones. Según informa el capitán adjunto de la Guardia Civil de Menorca, Luis Sanz, la rehabilitación beneficiará a las 54 familias de los funcionarios del Cuerpo residentes en el cuartel de Maó y a las 12 existentes en el pabellón de Ciutadella.
Además las oficinas, despachos y dependencias que utiliza la Benemérita en la Isla serán objeto de una reforma en beneficio de la mejora del servicio que prestan los agentes.
De este modo, la central de la Guardia Civil, ubicada en Maó, quedará totalmente adecuada y equipada, así como las dependencias de la unidad Pafite y del Seprona que se ubican en Ciutadella.
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