Gómez apuntó que, por el contrario, ha sido Menorca la que mejor ha evolucionado en lo que respecta a la edificación turística; en 2008 la inversión creció más de un 157 por ciento, lo que, en términos absolutos, supuso un volumen de 9,7 millones de euros.
Cifras globales
En cuanto al global de la edificación, en la Isla el año pasado la actividad se redujo un 44,26 por ciento, una cifra similar a la media de la Comunidad Autónoma, que fue del 44,45 por ciento. Las obras de viviendas y las reformas con proyecto cayeron un 55,3 por ciento y se generó un volumen económico por este concepto de 68,3 millones de euros.
En el mismo periodo la actividad en el sector no residencial decreció un 26,12 por ciento, y pasó de los 51,3 millones de euros de 2007 a sólo 37,9 millones de euros. En conjunto la construcción movió en la Isla 115,9 millones de euros durante el último ejercicio.
En el conjunto de Balears la edificación privada bajó un 44,45 por ciento y generó 1,2 millones de euros. También descendieron la obra pública y las edificaciones menores, un 29,5 y un 14,6 por ciento, respectivamente.
En relación al mercado laboral, el número de trabajadores asalariados en el sector descendió un 13,2 por ciento. En 2008 el sector empleo a una media de 45.583 personas. El volumen de autónomos, en cambio, experimentó un repunte, del 4,2 por ciento. En las Islas había el año pasado 17.561 trabajadores con este régimen en la construcción.
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