El sector lácteo critica el recorte de las ayudas del Govern balear

La nave municipal de La Trotxa presentaba ayer por la mañana un inusual aspecto, a diferencia de las ediciones precedentes del concurso morfológico. Los ejemplares de raza frisona, que el día anterior estaban postradas sobre la paja esparcida en el suelo, brillaban por su ausencia. Además, las gradas instaladas alrededor de la pista central de la nave, habilitada para la celebración del concurso, estaban sorprendentemente vacías.

La decisión de retirar el ganado vacuno frisón de la nave se fraguó tras la reunión que el sábado al mediodía celebraron la consellera de Agricultura del Govern, Mercè Amer, la consellera de Economía, Antònia Allès, y los representantes de AGRAME, AGRENA, FAGME, Unió de Pagesos, COINGA, UCAME y UCABAL, con la finalidad de analizar la situación del sector agrario. Las ayudas destinadas por la Conselleria de Agricultura del Goven balear para los propietarios de las explotaciones de ganado vacuno lácteo fue el detonante del episodio, que promovieron AGRAME, AGRENA, FAGME, mientras que Unió de Pagesos se quedó al margen.

Acto de fuerza
El descenso de las ayudas para las fincas de producción láctea, que han pasado de 180 a 100 euros anuales por cabeza de ganado, ha sido determinante para que las tres asociaciones agrarias coincidieran en realizar un acto de fuerza dirigido especialmente contra la política agraria del Govern balear. Los tres colectivos del campo expresaron su contrariedad y descontento con la Conselleria dirigida por Mercè Amer, debido a la falta de respuesta a las peticiones para que el borrador de la convocatoria de ayudas de 2008 al sector lácteo mantuviera el mismo importe del año anterior. La publicación en el BOIB del mismo sábado de la convocatoria de las ayudas correspondientes a 2008 constataba que el Govern no había tenido en consideración las alegaciones presentadas por las asociaciones agrarias. El recorte del 45,5 por ciento del importe de las ayudas en relación al 2007 fue tomado como una desconsideración hacia un sector que desde hace años padece la crisis de forma permanente y que, además, en los últimos meses sufre con intensidad los efectos de una coyuntura económica adversa. La situación de crisis se ha visto agravada por el cierre de la planta de El Caserío que Kraft tiene en cartera y, sobre todo, por el reciente anuncio por parte de COINGA del descenso del precio de la leche, hasta situarse en 0,30 euros el litro, cuando el coste de producción alcanza los 0,40 euros, según los ganaderos.

Unió de pagesos
La voz discordante en este episodio entre los colectivos agrarios estuvo protagonizada por Unió de Pagesos, que se desmarcó del boicot del sector hacia el Govern balear. Unió de Pagesos también manifestó ayer su rechazo al importe destinado a las explotaciones de producción láctea, que representa un importante recorte de las ayudas en relación a la cantidad concedida hace dos años. No obstante, este colectivo consideró desacertada la elección del concurso morfológico para exteriorizar el descontento de los profesionales del campo.
Por lo demás, la jornada dominical de la Fira del Camp transcurrió con absoluta normalidad registró una multitudinaria afluencia de visitantes, que se interesaron en conocer los productos y artículos expuestos en los estands de las empresas y comercios participantes.