Las autoridades locales y autonómicas expresaron su apoyo al empresariado menorquín - A.M.O.

TW
0

Moderado optimismo con la cautela de la crisis como trasfondo. Éste era el ambiente que se respiraba ayer en la segunda jornada de la feria EuroBijoux que se celebra por primera vez en el recinto de IFEMA de Madrid. Si durante el primer día se registró un 76 por ciento más de visitantes que en ediciones anteriores, en el día de ayer la tónica de contactos e intercambios comerciales también fue positiva con un 52 por ciento más de visitantes (a las 17 horas) que en la segunda jornada de la Exposición de Bisutería Española celebrada en 2009 en el Palacio de Congresos del Campo de las Naciones también de Madrid.

El cambio de ubicación sin duda está detrás de este esperanzador incremento, al coincidir el certamen con otras ferias relevantes en el panorama nacional e internacional en el sector de la moda como Bisutex, Intergift e Iberjoya, un hecho que fue destacado por todas las autoridades que ayer se dieron cita en los pasillos del ferial, entre las que se encontraban la consellera balear de Comercio, Industria y Energía, Francesca Vives, el presidente Marc Pons -que acudía por primera vez a EuroBijoux-, la consellera insular de Economía, Antònia Allès, el senador por Menorca, Arturo Bagur y el alcalde de Maó, Vicenç Tur. Con su presencia en pleno, las autoridades autonómicas y locales quisieron mostrar su apoyo decidido y unánime al sector después de la decisión de SEBIME de trasladar la feria de Maó a Palma dentro de su cambio de estrategia para impulsar las ventas.