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El 97,38 por ciento de los turistas que ocuparon los hoteles abiertos el pasado marzo fueron españoles, cifra que demuestra el potencial del turismo del IMSERSO, que ha llenado los cuatro establecimientos que funcionan en temporada baja –Farragut, Aguamarina, Topacio y Hamilton–, gracias a la oferta vacacional para mayores.

Sobre un 8,10 por ciento de la planta hotelera menorquina abierta, la ocupación en marzo fue del 87,10 por ciento, según la información ofrecida ayer por la Asociación Hotelera de Menorca (ASHOME). El dato supone un incremento de 14 puntos en relación al índice de ocupación registrado en el mismo mes de 2009 y viene corroborado por la evolución del tráfico interior ya que, según la estadística aeroportuaria, el pasado marzo llegaron 40.556 pasajeros en vuelos regulares, frente a los 35.037 del año anterior. Sin embargo, los vuelos chárter trajeron 3.706 pasajeros, 454 menos que en marzo de 2009.

El turismo para jubilados se presenta como un mercado por el que Menorca "debe apostar" para alargar la temporada, señaló ayer el gerente de la patronal hotelera, Joan Juanico, quien subrayó que además de los mayores españoles, la entidad trabaja para implantar el programa social de turismo europeo, que en el primer intento, en el año 2009, no prosperó. Las dificultades de comunicaciones con los países a los que se dirige el turismo social europeo –mercados emergentes principalmente del Este– ha convertido a los jubilados de los mercados tradicionales, como Gran Bretaña y Alemania, en el objetivo de los hoteleros, pero todavía se negocia un acuerdo con los touroperadores, hasta ahora reticentes.

Por otro lado, ASHOME ha ofrecido cifras de ocupación de los hoteles abiertos durante la Semana Santa, que alcanzó un 65 por ciento.