Convenio. Las partes rubricaron ayer el acuerdo en la sede episcopal de Menorca - Cris

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Desde hoy el Seminari de Ciutadella, uno de los edificios históricos más emblemáticos del casco antiguo, se ofrece como destino para potenciar el turismo de congresos y convenciones en Menorca. Así lo anunciaron ayer representantes de las tres partes implicadas en el proyecto, el Obispado, propietario del edificio, junto a la Fundació Destí Menorca y Ciutadella Turisme (CITUR).

En definitiva se trata de un nuevo producto turístico que figuraba entre los objetivos del Plan de Acción de CITUR 2010, según recordó la alcaldesa de la ciudad, Pilar Carbonero, quien compareció en la firma del convenio junto al obispo monseñor Salvador Giménez Valls y el presidente del Consell insular, Marc Pons.

Por su parte, el obispo hizo especial hincapié en la importancia que tiene para la Diócesis poder colaborar en la atención que se presta a las personas que llegan a Menorca. Al respecto destacó la satisfacción por el hecho de que "la Iglesia se ponga a disposición de la gente de la Isla y de los visitantes para que disfruten de lo que tenemos". Por otra parte, añadió que se trata de un edificio "muy estimado" por los menorquines y al que se le pueden dar nuevos usos dado que "desgraciadamente" ahora hay pocos seminaristas.

Durante la firma del convenio, Carbonero se centró en destacar el doble uso que a partir de ahora tendrá el edificio histórico, y recordó que en el marco del convenio se recoge como factor "imprescindible" la organización y colaboración necesaria para hacer la nueva actividad compatible con los otros usos que tiene el Seminari, como el museo o la celebración de conciertos.

Por su parte, Marc Pons quiso poner el acento en la importancia de un acuerdo "del que se beneficiará toda la sociedad menorquina" y destacó las ventajas del edificio para el desarrollo de reuniones y congresos en un entorno agradable y con gran tradición histórica.