Particulares. Todavía son pocos los hogares que optan por la instalación de placas solares - Cris

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En 2009 el consumo de energía eléctrica en Menorca disminuyó respecto al año anterior, un hecho que tan sólo cuenta con un antecedente en la historia de la Isla, en el año 1977, según se recoge en un estudio elaborado por el Observatori Socioambiental de Menorca (OBSAM). El hecho resulta al menos llamativo, después de 32 años en los que el gasto se ha ido incrementando año tras año, aunque según reconoce una de las ambientalistas del OBSAM, Sonia Estrada, "la disminución ha sido pequeña", y para ver si ese comportamiento se traduce en tendencia habrá que esperar todavía algún tiempo. Pero por el momento, el hecho de que deje de aumentar "ya es noticia". Por otra parte, cabe resaltar que el consumo de gases y combustibles está experimentando también una tendencia a la disminución desde 2005.

Tendencia

En lo que se refiere al consumo final de energía, sí que se puede hablar de un cambio de tendencia según apuntan desde el OBSAM. Desde 1990 hasta 2009 éste ha aumentando un 75 por ciento, pero hay que tener en cuenta que a partir de 2005 aparecen los primeros síntomas de estabilización hasta llegar a disminuir el año pasado. Resulta significativo también que el consumo "per capita" tenga una evolución
parecida, lo que demuestra
según los técnicos del OBSAM que la disminución del consumo total no se debe solamente al hecho de que haya menos gente en Menorca, algo en gran parte debido al descenso del turismo durante los últimos tiempos, sino también a que se está produciendo una reducción del consumo final por habitante.

El estudio de actualidad ambiental pone de manifiesto también que en los últimos tiempos se han producido cambios significativos en la aportación de las diferentes fuentes energéticas. Así, se ha comprobado cómo está aumentando la contribución de la centra térmica de Maó al total de energía generada, mientras que la importación desde Mallorca por cable submarino está disminuyendo. En lo que se refiere a las energías renovables, según explica Estrada, se ha pasado de tener una contribución de menos de un 1 por ciento del total de la energía eléctrica en 2004 al 2,4 por ciento en 2009, algo que se ha conseguido gracias a la entrada en funcionamiento hace seis años del parque eólico de Milà y a dos parques solares en 2008.

Uno de los hechos más significativos que se desprenden del estudio es que el año pasado la producción de energía solar superó a la eólica. Sin embargo, la asignatura pendiente en ese campo reside en la instalación de placas solares por parte de particulares. Según explica, Fernando Picó, una de los socios de la empresa Electrotecnia, son todavía pocas las personas que se aventuran a apostar por dichas instalaciones. Algunos de los que lo hacen, según relata, utilizan la energía para el consumo propio, mientras que otros prefieren venderla a distribuidoras como Endesa. No obstante, esa última opción está más extendida entre empresas de mayores dimensiones que utilizan sus techos para albergar esas instalaciones.

Emisiones de co2
Precisamente el aumento de las energías alternativas está contribuyendo, aunque de una forma no demasiado significativa, a la reducción de las emisiones de CO2 , que desde el año 2005 se están estabilizando hasta alcanzar una ligera reducción en 2009, por lo que la tendencia es similar a la del consumo energético. Sin embargo, dicha descenso en las emisiones sitúa a Menorca todavía lejos de cumplir los objetivos marcados por el Protocolo de Kyoto, tal y como queda reflejado en el estudio del OBSAM.