TW
0

Ficha: Lluís Plantalamor Massanet, Ciutat de Palma, año 1949. Casado, 2 hijos. Director/Conservador del Museo de Menorca

Pierre Teilhard de Chardin, teólogo y científico francés, que se llamaba a sí mismo "un peregrino del porvenir", a pesar de que sentía la tragedia de este mundo amenazado, seguía siendo el "profeta" del: hacía adelante y hacia arriba, buscando la construcción de un hombre que sería, no un super-hombre, sino "más hombre", estimando que la evolución humana apenas ha comenzado y que ésta no podrá ser sino espiritual.

Lluís Plantalamor cree en esta evolución y consecuentemente con ello se muestra optimista, aunque su optimismo sea, al igual que el de Teilhard de Chardin, un pesimismo superado.

¿Mis primeros recuerdos? … los veo como dentro de una nebulosa; por ejemplo recuerdo cuando nació mi hermana pequeña, a los hermanos nos llevaron a casa de un familiar y estando allí mi tío nos dijo que teníamos una nueva hermanita; por lo demás mi infancia se desarrolló a caballo entre Palma, Barcelona y Vic.

¿Dónde cursaste el Bachillerato?
En Palma y la carrera entre Palma y Barcelona.

Y a Menorca, ¿cuándo llegaste?
En mayo del 74 y desde entonces sólo he dejado la Isla en momentos puntuales, concretos; obtuve la plaza por medio de un concurso y posteriormente superé las oposiciones que me llevaron a Girona y de allí me vine definitivamente para Maó.

Como director del Museo de Menorca.
Como director/conservador del Museo. En cuanto a la pregunta sobre de qué organismo depende te diré que la propiedad es del Ministerio de Cultura, es decir, del Estado y la administración compete a la Conselleria de Cultura del Govern de las Illes Balears.

Aunque el Consell insular pretende que dicha gestión le sea traspasada.
Asumiendo dichas competencias lo cual me preocupa siempre y cuando el "pacto" no quede perfectamente cerrado; en ésta cuestión pediría la máxima claridad para que nada quedase supeditado a futuras interpretaciones.

¿Cuántos formáis el equipo humano?
Actualmente somos 9 personas, pero la plantilla estable no es ésta ya que la reconocida está compuesta por 24 profesionales.

¿Cómo valoras, en lo personal, ser el director/conservador de este Museo?
Como una satisfacción personal y considero que el cargo es más científico que directivo, cuestiones totalmente diferentes la una de la otra, incluso creo, por la experiencia que me han proporcionado los 36 años desempeñando esta doble función, que podría ser interesante separar ambas funciones en evitación de posibles "vicios" no siempre perceptibles por uno mismo.

Sin embargo creo que no existen problemas de adaptación.
Ninguno, se trata de gestionar el día a día y de adaptarte a esta realidad, trabajo que he asumido no sólo con ilusión sino con la máxima dedicación exigida en un cargo de tanta responsabilidad.

¿Qué sección o departamento es el más visitado?
Oficialmente no hay dependencias ya que el Museo funciona durante todo el año como un todo siendo nuestra máxima tarea la de conservación, como también los son los talleres y los "magatzems" imprescindibles en una entidad como la nuestra.

El Museo de Menorca, ¿cubre como tal todas las expectativas?
Personalmente me siento satisfecho, sobre todo cuando hablamos de una isla como la nuestra; lo deseable sería crecer, ir a más, pero tal como están las cosas no podemos aspirar a ello porque carecemos de los medios económicos necesarios.

Llegado a este punto es obligado el recordar que la pasada semana este mismo rotativo informó de las deficiencias que el Museo padece.
Sí y cuanto se dijo es cierto como también lo es que tal situación es de sobra conocida por los "responsables" del Museo; recientemente reiteré la urgencia de solucionar el problema de la climatización y se me contestó que no era una prioridad; en realidad me temo que el difícil momento económico que atravesamos condicione el orden de las prioridades, pero para mí el de la climatización del Museo es una de ellas porque conlleva el deterioro de determinados bienes arqueológicos.

Queda claro que tal situación no es por dejadez del Museo sino por falta de una respuesta económica que permita la subsanación de dicha deficiencia. Siguiendo el curso de la entrevista, la siguiente pregunta es ésta: ¿muchos visitantes?
Nuestra apuesta es por la calidad más que por la cantidad; las visitas masivas son poco numerosas pero siempre y en las distintas salas, hay gente interesada en conocer el legado que exponemos; en invierno en la jornada de "puertas abiertas", los sábados por la mañana, los menorquines que acuden a visitar el Museo son muchos, es cierto que en dicho día no hay que abonar entrada, pero lo importante es la función social educativa y cultural que el Museo debe ofrecer; también las visitas de los colegios, de antemano programadas, son muy positivas especialmente por la función pedagógica de las mismas.

Los menorquines que lo visitan, ¿qué sensación se llevan?
Que es algo muy significativo de la isla y de un valor incuestionable: mi sensación es positiva, les atrae y les gusta y les satisface sobre todo al descubrir aspectos que desconocían.

Aquel slogan de "Menorca, museo al aire libre", ¿sigue vigente?
Diré que es un tópico más; ten en cuenta que un monumento megalítico o cualquier posible lugar de "peregrinaje", para ser visitado necesita ser convenientemente habilitado y, lo que es más importante mantenido, lo cual requiere una inversión no siempre posible tanto en el aspecto económico como en el material; otra apartado interesante y necesario es el de crear "grups de recerca" para seguir investigando; labor en su conjunto complicada porque además conlleva el regular la forma de mantenimiento.

Después de tantos años viviendo en Maó, ¿cómo te sientes?
Recuerdo que cuando llegué a Menorca me propuse ser uno más de la isla y ahora, sin haber dejado de ser mallorquín ni abdicado de mis raíces catalanas, me siento un menorquín más.

¿Cómo definirías el carácter menorquín?
Sin excesivas diferencias con el resto de la gente de las otras islas; particularmente y desde el primer momento no tuve problemas de adaptación, anécdotas las tengo a millares pero todas dentro de un contexto normal; recuerdo que en ocasiones iba a visitar un predio y al desconocer si era, "es de baix" o es de "dalt" no siempre acertaba o que determinado papel vegetal, que me era totalmente necesario para mi trabajo, me era difícil obtenerlo con la prontitud requerida hasta el extremo de que aprovechaba cualquier viaje para traérmelo desde Barcelona o Palma, pero, por lo demás, normalidad absoluta.

¿Qué menorquín ilustre te atrae o te fascina?
Siendo Menorca una isla pequeña es impresionante la cantidad de personajes que ha dado; a míparticularmente me fascina un menorquín del siglo XIX que considero es poco conocido incluso por los propios menorquines, se trata de Rodríguez Femenías que tenía una visión impactante del futuro de la isla; yo le definiría como un personaje singular con una gran visión de futuro.

¿Crees que el "menfotisme" se ha instalado en nuestra sociedad?
No, creo que la sociedad, a pesar de las frustraciones, que las hay, sigue siendo consciente de la realidad, sin embargo la gente tiene sus límites y se acomoda dentro de ellos, aparentemente no ocurre nada pero siempre busca avanzar, ir hacia una evolución constante y sin hacer demasiado ruido.

¿Nos falta sentido crítico?
Creo que no; en los años 70 todos estábamos en un estado de "ebullición" que culminó con la revolución portuguesa, la de "los claveles" y yo que hacía menos de un año que había estado en Portugal no acababa de entender lo que estaba sucediendo pero todo aquello era fruto de que queríamos cambiar el mundo, de que aspirábamos a algo nuevo, incluso el movimiento "hippy" buscaba esta realidad; actualmente lo que pretendemos es cambiar el día a día lo cual nos lleva a que determinadas prioridades se vayan diluyendo tras habernos instalado en un modelo de sociedad más cómoda y menos "combativa".

A medida que vamos avanzando en nuestra conversación me doy cuenta de que eres una persona optimista, ¿acierto?
Del todo, porque creo en el hombre y en su capacidad de evolucionar.

André George, decía del Teilhard de Chardin, que su famoso optimismo era un pesimismo superado. ¿También lo es el tuyo?
Puede que también lo sea, no he llegado a planteármelo, pero sin una convicción positiva tendríamos que plantearnos, desde otras coordenadas, el futuro de la Humanidad.

El turismo ¿es el futuro de Menorca?
Es incuestionable que el turismo es ya uno de los elementos básicos de la economía de la isla, en los años 60 este fenómeno era muy cuestionado pero, dadas las circunstancias actuales, el turismo como tal es bueno, siempre y cuando no absorba a la sociedad que debe mantener sus "constantes vitales".

Has apuntado que consideraste la ecotasa como una herramienta útil e incluso necesaria, ¿mantienes esta misma postura?
Desde luego que sí; en mis viajes al extranjero me he visto forzado a pagar toda clase de tasas por ello, y desde mi experiencia personal, creo que la ecotasa, bien planificada y adaptada a la realidad, sería útil y necesaria siempre y cuando repercutiese en las infraestructuras de la isla y en los bienes culturales.

¿Crees que existe crisis de valores?
No, no creo que exista crisis de valores, existe, esto sí, un cambio en la concepción de los valores "tradicionales", existe otra sensibilidad producto de una evolución que yo considero razonablemente aceptable.

¿Vamos en la dirección correcta?
Pienso que sí, incluso creo que en muchas ocasiones caemos en criticar más la paja en el ojo ajeno que la viga en el nuestro; recordarás aquella preciosa película de Visconti, "El Gatopardo", inspirada en la novela histórica de Giuseppe Tomasi de Lampedusa que evoca la decadencia de una familia aristocrática de Sicilia, ahora ocurre igual, es cierto que nada será como antes, ahora avanzamos dentro de una evolución que considero más aceptable que una ruptura.

La cultura es ¿un lujo o una necesidad?
Las dos cosas; el hombre para crecer necesita de la cultura pero ocurre que en tiempos de necesidades, de crisis, ésta se ve seriamente limitada e incluso coartada.

Cuando viajas, ¿visitas los museos?
Los visito y también los centros culturales sin embargo me gusta "sumergirme" entre la gente, conocer sus costumbres y disfrutar de su forma de ser porque es entonces cuando te das cuenta que son ellos quienes dentro de su peculiaridades, que para nosotros son a veces caóticas, deben buscar sus propias soluciones no que éstas les sean impuestas desde el exterior por muy novedosas que parezcan.

Interpreto que quieres decir que determinadas soluciones aptas para unos no son exportables para otros, ¿es así?
Lo es; la Revolución rusa trajo consigo la implantación del régimen comunista que con sus luces y sombras fue bueno para la URSS pero, exportarlo a los países del este europeo, con otras raíces y otra cultura, no tenía sentido; actualmente ocurre lo mismo en otras zonas del mundo, con características y mentalidad muy diferente a las de las democracias occidentales, "status" que queremos instalar sin percatarlos de que la base sociológica no es la misma.

A la juventud, ¿qué le dirías?
Que haga su camino, sin miedo y aunque sin desdeñar las experiencias ajenas no deben olvidar que son ellos quienes deben hacer camino y, a través de sus vivencias, crearse su propia experiencia.

Evolución, ¿qué es para ti?
La ligo con creación, al estilo de Tailhard de Chardin y como científico sin desdeñar nada, creo que es un peregrinaje hacia el futuro que presiento debe fundamentarse en un mejor aprovechamiento de las personas, buscando aquella gente que quiera apostar, con optimismo, por un mañana mejor.

Y en este momento, ¿qué le pides a la vida?
Las constantes vitales las tengo cubiertas de ahí que sólo pida que la sociedad, que tiene medios para hacerlo, sea capaz de seguir evolucionando positivamente.

Recordaré, como cierre de esta entrevista, una frase de Pierre Teilhard de Chardin: "Abierta hacia alguna cosa que escapa a la muerte total, la evolución es la mano de Dios que nos vuelve a traer a él"… evolución en el sentido de creación, un pensamiento que se aloja en la mente de Lluís Plantalamor.