Algunos vecinos de Es Grau han colaborado en la tarea de retirada de boyas y cuerdas. - Gemma Andreu

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Vecinos de Es Grau y dos buzos voluntarios retiran cuerdas, boyas y restos de los antiguos fondeos existentes en esta cala de Maó con el objetivo de preparar la zona para la ordenación de los amarres y fondeos prevista por el Consell insular y la Demarcación de Costas y que estará plenamente operativa a partir de mayo de 2011. La lámina de agua deberá quedar limpia a finales de este mes o principios de octubre, y los primeros trabajos de la reordenación comenzarán la próxima semana, con la parte topográfica y la instalación de los cabos y los elementos de sujeción en el fondo marino, quedando pendiente las boyas y pantalanes, que se colocarán cuando empiece la temporada, según ha explicado esta mañana el presidente de la Asociación de Usuarios de Amarres y Fondeos de Es Grau, Joan Fullana.

La limpieza del fondo de la cala ha comenzado a primera hora del día y el presidente del Consell, Marc Pons, y el conseller de Ordenación del Territorio, Joan Marqués, han visitado el núcleo costero para comprobar la realización de estas tareas previas a la ordenación de la actividad náutica en este núcleo de Maó que, junto con el de Cala Canutells, constituye una experiencia piloto y sentará las bases del futuro Plan Insular de la Costa de Menorca.

Los trabajos se han realizado en una mañana soleada, con la participación de numerosos residentes en la zona y de amarristas, y entre la expectación de los propios vecinos, satisfechos con el inicio del proyecto. Los restos extraídos del mar se han depositado en tres contenedores diferentes, uno para las boyas y plásticos, otro para las cuerdas, y otro para las parte metálicas, con el fin de que se puedan destinar al reciclaje.